El uso fraudulento de las tarjetas de aparcamiento para personas con movilidad reducida sigue siendo una realidad. A pesar del endurecimiento de las penas, con la que te pueden caer hasta tres años de cárcel, la gente sigue utilizándolas.
ABC de Sevilla informa de un nuevo caso de fraude que ha sido hallado por la Policía de Castilleja de la Cuesta (Sevilla). En este caso han encontrado el uso de tarjetas falsificadas, manipuladas e incluso un mercado ilegal de licencias en el Charco de la Pava.
Más de 20 conductores han sido sancionado en la citada localidad por usar estas licencias de manera ilícita. Todos ellos deberán de responder ante un juzgado por un delito de falsedad en documento oficial.
«En las inmediaciones del centro de salud o en la piscina municipal. Allí fue donde empezamos a interceptar tarjetas falsificadas y en un número que nos llamó mucho la atención porque no era algo anecdótico», señalan fuentes policiales a ABC.
Fue entonces cuando los policías comenzaron a realizar un operativo específico que se saldo con más de una veintena de sanciones.
Uno de los conductores que no correspondía con el titular de la tarjeta que utilizaba aseguró que la había comprado en el Charco de la Pava, donde existe un mercadeo ilegal de las tarjetas de aparcamiento PMR.
«Personas que ya no las necesitan y que deciden sacarle un dinero. También hay quien aprovecha que el titular ha fallecido y en lugar de comunicar la defunción a la Junta, continúa haciendo uso de ella o la vende a un tercero», recoge ABC.