Tener una moneda valiosa puede ser como ganar un premio en la Lotería de Navidad. Y es que aunque existen millones de monedas en el mundo, si das con la correcta, puedes ganar muchísimo dinero. Esto es gracias a que el mundo del coleccionismo, a pesar de no ser nuevo, se ha globalizado gracias a la llegada de internet.
El mundo de la numismática es tan amplio que si tienes buen ojo, puedes hacer negocio con él. Esto no significa que los entendidos en la materia se conforme con cualquier cosa. Al contrario. Los coleccionistas son personas que disfrutan con mucho más allá de lo que significa hacer acopio de monedas para tenerlas como un tesoro.
Pues en realidad, esta afición tiene mucha más profundidad. El amante de la numismática siente cada moneda como única. Estudia su historia, la época en la que surgió, su diseño, la cuida como un tesoro, y para ello también debe conocer el material de la que esta fabricada y la forma correcta de conservación. Es decir, todo un arte.
Pero esta pasión, ha servido a muchas otras personas a adentrarse en este mundo como forma de negocio. Un negocio al que tú también puedes acceder. Y es que si tienes monedas en casa, deberías ponerte las pilas porque por algunos ejemplares, se pagan auténticas fortunas. ¿Y si eres rico y no los sabes?
MONEDA DE 1 CÉNTIMO CON LAS QUE PODRÁS GANAR 50.000 EUROS
El mundo de la numismática es tan amplio, que la moneda más valiosa puede ser una actual. Es decir, solo basta con que los coleccionistas pongan el foco en una pieza, para que está adquiera valor. En este sentido, no hay nada escrito, pues de igual modo pueden pagar un dineral por una moneda de otro siglo, como hacerlo por una de euro vigente en la actualidad. No obstante, debes estar atento a lo que se demanda en el mercado. Pues, ¿Imaginas vender un céntimo por 50.000 euros?
Es posible. Por increíble que parezca, hay un ejemplar que lo vale. Se trata de la moneda de 1 céntimo acuñada en el año 2002 en Alemania. Es una edición que fue diseñada por Rolf Lederbogen, que cuenta con la característica además, de tener un roble dibujado en su reverso. Por último, cuenta con un punto diferencial que la hace distinta: El tipo de acero y por tanto el color en el que esta fabricada. Por todos estos motivos, tiene un precio de 50.000 euros en el mercado.
PUNTOS QUE APORTAN VALOR
Aunque no hay nada estipulado de forma tan concreta como para saber exactamente si una moneda tiene valor o no, existen algunas premisas que suelen cumplirse en la mayoría de los ejemplares en los que los coleccionistas ponen el foco. Y aunque hay más, con estos tres motivos te puedes hacer una idea de si tienes una moneda de valor.
En primer lugar, es habitual que una moneda antigua sea valiosa. ¿El motivo? Pues el solo paso de los años le atribuye una serie de características que llaman la atención. Por ejemplo, la historia vivida. Y es que de un ejemplar longevo, se pueden descubrir muchas cosas. Pero también las exclusividad, pues cuantos más años pasen, más difícil será de que haya más ejemplares.
Y aunque la historia vivida de una moneda es un gran punto a favor, existen otras premisas que también pueden ser muy significativas. Una de ellas es, que la pieza se haya diseñado para conmemorar un hecho histórico. Por último, un error de acuñación, también le da valor a una moneda. En ambos casos, las exclusividad es una gran baza.