Las personas que reciben una pensión de jubilación en España ya tienen marcado en el calendario el próximo día 31 de marzo, ya que es la fecha límite establecida por la Seguridad Social para presentar la documentación necesaria para continuar cobrando esta prestación. De este modo, la Administración insta a estos colectivos a entregar la declaración anual de ingresos, un documento que manifiesta que los pensionistas pueden acreditar que sus ingresos están por debajo del tope establecido por las instituciones y pueden seguir cobrando la pensión no contributiva tras la retirada de la actividad laboral.
Por tanto, según ha podido saber este medio, en caso de superarse ese umbral, la cuantía de la pensión será reajustada en base a la situación económica de cada beneficiario. Este tipo de pensiones tendrán un importe anual de 7.905,80 euros en 14 pagas, por lo que, en comparación con el año pasado, supone un incremento de 655,2 euros. Son prestaciones económicas para ciudadanos que las necesiten para la subsistencia, a pesar de que no hayan cotizado nunca o lo hayan hecho el tiempo insuficiente.
Documentación para no perder la pensión en España
«Ya está abierto el plazo para que los pensionistas de la Seguridad Social española residentes en el extranjero puedan acreditar su vivencia», recuerdan desde la Administración Pública. Igualmente, este organismo también señala que este trámite está destinado exclusivamente a los pensionistas que residen en el extranjeros, por lo que «si resides en España no tendrás que realizarlo».
Los pensionistas residentes fuera del territorio nacional, deben enviar un certificado de fe de vida durante el primer trimestre del año para no perder los ingresos por la prestación de jubilación. Por el contrario, no cumplir con este trámite también podría resultar en la suspensión temporal de la pensión. Además, se debe comunicar cualquier cambio en la dirección, situación personal o situación económica del beneficiario a la entidad que gestiona los ingresos derivados de la pensión de jubilación en un plazo de 30 días.
De este modo, la falta de presentación de documentos no significa perder la pensión de forma permanente. De hecho, si se suspende, se notificará y la restauración del pago solo ocurrirá después de presentar la documentación requerida. El documento se puede presentar tanto de forma online en la sede electrónica del IMSERSO como presencial, en las oficinas de asistencia en materia de registros de cualquier administración pública. Además, si la suspensión temporal ocurre, tendrás un máximo de 90 días para presentar la documentación y recuperar los pagos perdidos.
Certificado de fe de vida
De acuerdo con la Secretaría de Estado, el certificado de fe de vida es el documento expedido por el Registro Civil que acredita que, en la fecha de su expedición, la persona a la que se refiere se encuentra viva, así como su estado civil. Se trata de un documento estrictamente necesario para los pensionistas y jubilados que viven en el extranjero deben, pero cobran de la Seguridad Social española, por lo que deben demostrar anualmente que siguen con vida y, por ende, mantienen el derecho a recibir su pensión.
Por ello, los beneficiarios jubilados y pensionistas obligados a presentar este trámite, deberán hacerlo antes del 31 de marzo de 2025. De lo contrario, podrían poner en riesgo el derecho a continuar cobrando su pensión de jubilación u otra pensión contributiva de la Seguridad Social. Este trámite, por su parte, se debe presentar todos los años durante el primer trimestre de cada año. Por tanto, se deduce que consiste en una fe de vida emitida por la Autoridad Competente del país de residencia en el año que se acredite la vivencia para continuar recibiendo la pensión que tuviera reconocida el usuario.