Las personas que cobran una pensión contributiva de la Seguridad Social y viven en el extranjero deben completar un trámite obligatorio antes del 31 de marzo de 2025. En caso de no realizar este trámite, el ciudadano podrá perder el derecho a seguir cobrando su pensión de jubilación.
En concreto, estos pensionistas están obligados a acreditar su vivencia a través de la presentación del documento de fe de vida. A través de este documento, deben demostrar ante la Seguridad Social que siguen vivos y que continúan con el derecho a cobrar su pensión contributiva de jubilación.
Este trámite es obligatorio para todas aquellas personas que cobran una pensión contributiva de la Seguridad Social y viven en el extranjero. Es decir, se aplica para pensionistas de jubilación, viudedad, incapacidad permanente u orfandad.
Trámite para no perder la pensión de jubilación en 2025
Tal y como hemos explicado anteriormente, este trámite solamente es obligatorio para aquellas personas que cobran una pensión de la Seguridad Social española y residen en el extranjero. Es decir, los pensionistas que residen en España no tendrán que completar ningún trámite al respecto.
Así, los pensionistas que residan en el extranjero podrán presentar el documento de fe de vida a través de los siguientes canales habilitados por la Seguridad Social:
- Aplicación móvil ‘VIVESS’, que cumple su segundo año en vigor en 2025.
- A través de comparecencia personal en la Oficina Consular correspondiente.
- Comparecencia expedida por la Consejería o Sección de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social.
Actualmente, el modo más sencillo de acreditar la vivencia es a través de la aplicación ‘VIVESS’, ya que permite presentar el documento de fe de vida de manera online, sin necesidad de que el pensionista se desplace presencialmente.
Consecuencias de no acreditar la vivencia
Durante el primer trimestre de cada año, los pensionistas que residen en el extranjero y cobran una pensión de la Seguridad Social española, tienen la obligación de presentar el documento de fe de vida.

Si un pensionista no acredita su vivencia antes del 31 de marzo de 2025, el cobro de su pensión quedará suspendido. De este modo, no podrá volver a percibir su pensión de jubilación hasta no presentar el documento de fe de vida correspondiente.
La finalidad de este trámite es evitar delitos de estafas contra la Seguridad Social. Es decir, evitar que pueda darse el caso de que un pensionista haya fallecido y un familiar siga cobrando su pensión de manera ilícita.
Cuando una persona fallece, la pensión contributiva que está cobrando se extingue. No obstante, una persona fallecida puede originar el derecho a cobrar determinadas pensiones para sus familiares, conocidas como pensiones de muerte y supervivencia (viudedad, orfandad y en favor de familiares).
Actualmente, más de 115.000 personas cobran una pensión de la Seguridad Social y residen en el extranjero. Todos estos pensionistas tienen que acreditar su vivencia antes del 31 de marzo de 2025, para no poner en riesgo la percepción de su pensión.
De forma previa, la Seguridad Social ha enviado una carta a todos estos pensionistas informándoles sobre la obligación de presentar el documento de vida durante el primer trimestre del año. Además, desde la Administración informan a todos estos pensionistas sobre las ventajas de acreditar la viviencia a través de la aplicación ‘VIVUSS’.