Como ya sucedió durante la primera ola de la pandemia, vuelve el atasco al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) debido a los nuevos ERTES que se están tramitando en las últimas semanas. Este colapso está haciendo que el 40% de los trabajadores que se han acogido a la ayuda encuentren dificultades para recibir la prestación a tiempo.
En las dos primeras semanas de noviembre se han tramitado casi 150.000 ERTEs con más de 720.000 trabajadores incluidos. Esta nueva tramitación implica una sobrecarga sobre los casi 8.000 trabajadores del SEPE que arrastran el cansancio de la primera ola, según apuntan los sindicatos.
Sin embargo, como remarcan desde la UGT, el problema se arrastra desde hace meses pues no se ha conseguido dar una solución a los errores que se han ido acumulando durante los meses más duros, cuando más de 3,5 millones de españoles se acogieron al ERTE.
En estos casos, para evitar males mayores a los afectados, se prefirió en caso de duda reconocer los pagos antes que darle la baja, una solución que ha provocado que muchos trabajadores que habían salido totalmente del ERTE o de forma parcial se les haya seguido abonando. Ahora, cuando estos trabajadores vuelvan otra vez al ERTE, el sistema les detectará que adeudan cobros indebidos y compensará dichas deudas con las nuevas pagas, imposibilitando el ingreso bancario de sus pagas.
El SEPE se encuentra de nuevo colapsado
En este sentido, desde UGT remarcan que este proceso conlleva dos meses. El Departamento de Cobros Indebidos del SEPE, que se encuentra colapsado, no pudo comunicar a todas las personas que siguieron cobrando cantidades cuando no les correspondía.
Por esta razón, el proceso exige que se les comunique por escrito para que el afectado pueda presentar las alegaciones oportunas. Hasta que el SEPE no tiene constancia de que este paso se ha realizado, no solicita formalmente la devolución de las cantidades transferidas indebidamente.
Esto es algo muy difícil que se produzca, pues todavía hay muchos afectados que no han recibido siquiera la comunicación del Departamento de Cobros Indebidos del Sepe. Finalmente, hay un plazo de un mes para devolver este dinero.
En caso de que durante este proceso, el trabajador vuelve al ERTE, se encontrará con que el sistema no le abonará la nueva prestación, sin tener en cuenta en qué fase se puede encontrar este proceso de reclamación de la ayuda.
Falta de medios y personal
Los retrasos que se prevén que van a producirse no se deben exclusivamente al atasco generado por los errores en el pago indebido o en la nueva carga de trabajo. Esto se debe más a la falta de personal y de medios que todos los sindicatos denuncian y que el propio SEPE reconoce.
En 2010, el SEPE contaba con 10.828 empleados y en la actualidad son 7.935, tras que en primavera llegaran a reforzarse con 1.000 contratos temporales y hace un mes se haya ampliado otros 500, con el objetivo de hacer frente a las tramitaciones en la segunda ola.