Una pensión es una cantidad de dinero, habitualmente mensual, que un organismo oficial público paga a una persona como ayuda económica, en base a un motivo determinado.
En relación a las pensiones del Estado español, se trata de un pago de la Seguridad Social, ya sea temporal o de por vida, a una persona por una situación concreta, ya sea por jubilación, viudedad, incapacidad, etc.
La Ley de cada país establece las condiciones básicas por las que una persona tendría derecho a percibir una pensión, así como los tipos de jubilación existentes. Son los trabajadores en activo los que sustentan estos pagos, para a su vez, tener derecho en un futuro a percibir dicha compensación económica en forma de pensión contributiva.
En España existen diferentes tipos de pensiones reguladas por Ley, aunque todas ellas parten de la Seguridad Social, el organismo encargado de gestionar los recursos públicos destinados al pago mensual de pensiones.
¿Qué son las pensiones?
Como decíamos, las pensiones son pagos, generalmente de carácter público, que se realizan desde un organismo público hacia un particular, debido a diferentes motivos.
Más allá de definir qué es una pensión, distinguimos dos grandes grupos de tipos de pensiones en España, las contributivas y las no contributivas, aunque ambas incluyen otros grupos que identifican la situación de las personas que las perciben. Las siguientes son las clases de pensiones en España en la actualidad.
Pensiones contributivas
Las pensiones contributivas suelen tener un carácter temporal indefinido, es decir, finalizan con la defunción de la persona que se beneficia de esta prestación.
Para poder solicitar una pensión contributiva es obligatorio haber cotizado un mínimo de tiempo a la Seguridad Social, entre otros requisitos. Esta contribución previa es lo que da nombre a este tipo de pensiones.
En las pensiones contributivas se incluyen los siguientes subsidios.
Pensión contributiva de jubilación
Existen las siguientes clases de pensiones en base a las pensiones contributivas.
- Jubilación ordinaria
- Pensión anticipada al ser mutualista
- Anticipada sin mutua
- Anticipada por realización de actividades penosas
- Pensión por actividades tóxicas o insalubres
- Anticipadas por discapacidad
- Pensiones contributivas parciales
- Pensiones contributivas especiales
Pensión contributiva por incapacidad permanente
- Total
- Absoluta
- Gran invalidez
Pensión contributiva por fallecimiento
Estas pensiones se perciben por fallecimiento de una persona de la que se depende económicamente.
- Pensión de viudedad
- Pensión de Orfandad
- Pensiones en favor de otros familiares
Pensiones no contributivas
Las pensiones no contributivas se conceden a personas que no disponen en un momento dado de recursos suficientes, y que no han cotizado nunca, o bien no han llegado al mínimo indispensable para percibir una pensión contributiva.
Es importante señalar que la gestión de las pensiones no contributivas pertenece a cada Comunidad Autónoma, y en el caso de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, al IMSERSO.
La cuantía de las pensiones no contributivas, así como su revalorización, está regulada por Ley.
¿Cuántas pensiones no contributivas hay en España?, habitualmente se distingue entre dos tipos de pensiones no contributivas diferentes, las pensiones de invalidez y las de jubilación.
Pensión no contributiva de invalidez
Esta pensión asegura a los ciudadanos en estado de invalidez una prestación económica. Además de dicha prestación, la pensión incluye asistencia médico farmacéutica gratuita y otros servicios de salud complementarios, que se conceden dependiendo del tipo y el grado de invalidez.
Los requisitos necesarios para recibir dicha prestación son los siguientes:
- Tener entre 18 y 65 años
- Residir en territorio español de manera legal, y haberlo hecho durante al menos cinco años, dos de ellos inmediatamente anteriores a la solicitud de dicha prestación.
- Tener acreditada una discapacidad de, al menos, un 65%.
Pensión no contributiva de jubilación
Esta pensión asegura a todos los mayores de 65 años en estado de necesidad económica una pensión, asistencia médico farmacéutica gratuita y, en caso de necesitarlo, servicios sociales complementarios.
A diferencia de las pensiones contributivas, esta pensión se concede a personas que, o bien no han realizado las contribuciones mínimas a la Seguridad Social durante su período laboral, o bien no han cotizado nunca.
Los requisitos para solicitar una pensión no contributiva de jubilación son los siguientes:
- Tener 65 años o más
- Residir en territorio español, o haber residido durante al menos 10 años en España.
Estas son las condiciones imprescindibles para tener derecho a una pensión no contributiva.
Como ves, las pensiones contributivas y no contributivas tienen diferencias, los tipos de pensiones por incapacidad, por ejemplo, pueden ser contributivas o no contributivas dependiendo de cada caso.