El Gobierno de España ha aprobado un aumento de la cuantía de la pensión no contributiva de incapacidad en 2025. Concretamente, se ha fijado una subida del 9% en la cuantía de este tipo de pensiones, con efectos desde el 1 de enero de 2025.
Las pensiones no contributivas son un tipo de pensión destinada a personas con discapacidad que se encuentran en situación de vulnerabilidad. Para cobrar esta pensión, gestionada por el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO), no es necesario cumplir con ningún requisito de cotización.
Cuantía máxima de la pensión no contributiva de incapacidad en 2025
Desde el IMSERSO explican que «la pensión no contributiva de incapacidad asegura a todos los ciudadanos en situación de incapacidad y en estado de necesidad una prestación económica, asistencia médico-farmacéutica gratuita y servicios sociales complementarios».
Con el aumento del 9% con respecto al año 2024, la cuantía de la pensión no contributiva de incapacidad en 2025 se sitúa en 7.905,80 euros al año. Supone un importe de 564,70 euros al mes, ya que este tipo de prestaciones se abona en catorce pagas durante el año.
Es decir, la pensión no contributiva de incapacidad se devenga en 14 pagas durante el año. A la persona beneficiaria le corresponde recibir doce pagas correspondientes a las doce mensualidades del año, y dos pagas extraordinarias. Las pagas extraordinarias se abonan en los meses de junio y noviembre de cada año.
Para tener derecho a cobrar una pensión no contributiva de incapacidad en España en 2025, es obligatorio tener reconocida una discapacidad igual o superior al 65%. Sin embargo, el IMSERSO ofrece un complemento económico para las personas beneficiarias que tengan reconocida una discapacidad igual o superior al 75%.
En este caso, las personas perceptoras de una pensión no contributiva de incapacidad pueden cobrar un complemento con una cuantía equivalente al 50% de los 7.905,80 euros de la prestación. Así, en 2025, el importe de este complemento se ha fijado en 3.952,90 euros al año.
Por tanto, la cuantía máxima que se puede cobrar por una pensión no contributiva de incapacidad en 2025 es de 11.858,70 euros al año (847,05 euros al mes), siempre que la persona beneficiaria tenga reconocida una discapacidad igual o superior al 75%.
Condiciones para cobrar la pensión no contributiva de incapacidad en 2025
Para poder percibir una pensión no contributiva de incapacidad en 2025 no es necesario cumplir con ningún requisito de cotización, tal y como hemos expuesto anteriormente. Sin embargo, para tener derecho a cobrar esta prestación, es obligatorio reunir las siguientes condiciones exigidas por parte del IMSERSO:
- Tener reconocida una discapacidad igual o superior al 65%.
- Tener una edad entre 18 y 65 años de edad. A partir de los 65 años de edad, el ciudadano puede pasar a percibir la pensión no contributiva de jubilación; siempre que cumpla con los requisitos adecuados.
- Residir en territorio español y haberlo hecho durante un periodo de cinco años. Dos de los años de residencia deben ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la fecha de solicitud de la prestación.
- Carecer de rentas. Para el IMSERSO, en 2025, existe carencia de rentas cuando los ingresos de la persona beneficiaria en cómputo anual son inferiores a 7.905,80 euros.
Como conclusión, los profesionales del Instituto de Mayores y Servicios Sociales indican que «la gestión y reconocimiento del derecho a percibir una Pensión no Contributiva se realiza por las Comunidades Autónomas que tienen transferidas las funciones y servicios del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO)».