Un testamento es un documento de vital importancia para la persona que lo realiza. Esto este no deja de ser una declaración de últimas voluntades mediante la cual una persona determina qué debe hacerse con su patrimonio tras su fallecimiento. Cabe destacar que este proceso es mucho más complejo. En primer lugar, porque el testador no tiene plena libertad para repartir sus bienes o elegir a sus herederos.
Pero, ¿Cómo es esto posible? Porque el testamento debe redactarse teniendo en cuenta lo que la ley recoge en cuando a derecho de sucesiones. Esto quiere decir que el testador, podrá repartir sus bienes contando con ciertas premisas a respetar. Entre ellas, se encuentra la obligatoriedad de legar una parte, llamada legítima, a sus herederos forzosos.
Por este motivo, un testamento puede considerarse nulo incluso si el testador esta aún vivo. Siempre que el acto jurídico no se ajuste a lo dicho por la ley, puede considerarse nulo un testamento. La suerte es que si esta denuncia para anular un testamento se hace con el testador en vida, tendrá la posibilidad de hacerlo de nuevo.
Un testamento puede considerarse nulo por estos motivos
En el Código Civil se recogen las condiciones específicas para que un testamento sea válido ante la ley. Por tanto, si se descubre que el documento dejado por el testador no cumple con todo lo en él especificado, perderá toda su validez. En estos casos, el reparto de la herencia se efectuará con respecto a lo que la ley dispone en materia de sucesiones. Pero, ¿Cuáles son los casos por los que un testamento puede ser nulo?
El testador no tiene capacidad legal para hacer un testamento
Según el Código Civil estas personas son:
- Los menores de 14 años.
- El otorgado por quien no se encuentre en su cabal juicio.
- El testamento redactado a mano otorgado por un menor de edad.
- El testamento cerrado otorgado por personas que no sepan o no puedan leer.
Hay indicios de engaño o intimidación al testador
En este caso, hay que acreditar que durante la redacción del testamento hubo violencia, fraude o dolo por parte de terceros. De ser así, la voluntad del causante se vería afectada por lo que el testamento sería nulo. Es fundamental que el testador se encuentre en plenas facultades y libre para tomar sus propias decisiones.
Defecto de forma en el testamento
Podrá considerarse nulo un testamento si contiene irregularidades en su proceso formal. Estas pueden ser desde la falta de alguna firma, falta del lugar, fecha y hora, y en definitiva, aunque es poco habitual, una mala redacción del documento que no se ajuste a lo recogido en el Código Civil.
Formas prohibidas de testar
Así, el Derecho Civil Común recoge que se considera nulo un testamento si:
- Es mancomunado. Esto es cuando dos personas disponen su voluntad en un único documento. El Código Civil deja claro que al redactar un testamento debe haber un solo testador, ya que el acto de formalizar el mismo, es totalmente individual. No obstante, este tipo de testamento está aceptado en Aragón, Galicia y País Vasco.
- Testamento por comisario. El Código Civil es tajante al exponer que «El testamento es un acto personalísimo: no podrá dejarse su formación, en todo ni en parte, al arbitrio de un tercero, ni hacerse por medio de comisario o mandatario».