UGT Andalucía ha realizado un informe sobre ‘Discapacidad Sobrevenida. Análisis y Necesidades’ que pone de manifiesto que, cuando se sufre en edad laboral, no llega al 1% el número de personas que, tras sufrir una discapacidad sobrevenida, se vuelve a incorporar al mercado de trabajo.
Según los datos, el 20’1% eran ocupados en el sector servicios y la tasa de paro de las personas con discapacidad era del 33,7%. Sin embargo, la tasa de paro de los hombres con discapacidad es más baja (30,9%) que las de las mujeres con discapacidad (38,1%). Asimismo, la tasa de actividad de personas con discapacidad en Andalucía es del 33,7%, vahando en 3,8 puntos respecto a la estadística del año pasado.
La discapacidad sobrevenida surge a partir de los seis años de edad de forma no congénita y hace que en la mayoría de los casos, las personas que la sufren experimenten una asimilación acelerada de su nueva situación, en la que es vital un despliegue temprano de apoyos para adaptarse a las nuevas circunstancias.
Pese al marco jurídico que vela por los derechos de las personas con discapacidad , la legislación actual es incongruente en este sentido, ya que permite que se produzca la extición del contrato de trabajo, en lugar de una adaptación por parte de la empresa del puesto. Por ello, UGT ha reivindicado que se dé una solución rápida y eficaz del artículo 49 del Estatuto de los Trabajadores.
«Como sindicato nos toca pactar en la negociación colectiva para incluir cláusulas que garanticen los derechos y la permanencia en el empleo de las personas con discapacidad sobrevenida», declaraba UGT en un comunicado.
Manifestando además que “la verdadera integración debe contextualizarse dentro de los derechos humanos, en ámbitos como el acceso la libre elección de un empleo en igualdad de condiciones laborales y salariales, a la educación, a la formación, a la cultura, o al transporte en igualdad de condiciones, y dotar a las personas con discapacidad de herramientas para su pleno ejercicio».