La incapacidad permanente total es uno de los grados de incapacidad que puede reconocer el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) a un trabajador a causa de una serie de lesiones o enfermedades. En este caso, la pensión de incapacidad permanente total es una prestación económica contributiva que es compatible con la realización de determinadas actividades laborales, siempre que no entren en conflicto con la condición de incapacidad reconocida.
Además, la incapacidad permanente total no podrá ser compatible con la realización de una actividad laboral perteneciente a la profesión habitual.
El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) es el organismo encargado de otorgar el derecho a una pensión de incapacidad permanente en España. En última instancia, la Justicia también tiene potestad para dar viabilidad a este derecho.
Tipos de incapacidad
Así, existen cuatro tipos principalmente de incapacidad permanente; las cuales se caracterizan en función de hasta que punto inhabilita al trabajador para desempeñar una profesión habitual u otra actividad laboral:
- Incapacidad permanente parcial: Inhabilita al trabajador de forma parcial para desempeñar su profesión habitual. En este caso, el trabajador recibe una indemnización económica pero puede seguir desarrollando su profesión habitual.
- Incapacidad permanente total: Esta situación inhabilita al trabajador para desarrollar su profesión habitual; pero tiene la posibilidad de compatibilizar la pensión con otras actividades laborales que no entren en conflicto con la pensión.
- Incapacidad permanente absoluta: Inhabilita al trabajador para desarrollar cualquier profesión u oficio.
- Gran Invalidez: Inhabilita al trabajador para cualquier profesión u oficio. Además, se reconoce que el trabajador necesita la ayuda de una tercera persona para llevar a cabo las actividades básicas de la vida.
El grado de incapacidad reconocido también tiene una influencia importante en la cuantía mensual a recibir por la pensión. En este sentido, es necesario aclarar que la incapacidad parcial consiste en una indemnización, y no en una pensión como tal.
Incapacidad permanente y profesión habitual
La profesión habitual cuando hablamos de incapacidad permanente se refiere a las funciones profesionales que realiza un trabajador cuando sufre una lesión o enfermedad que le inhabilita para el desarrollo de dicha actividad laboral.
Según informan los compañeros de ‘CampmanyAbogados‘, la normativa de la incapacidad permanente total para la profesión habitual establece que «en caso de que la limitación se produzca debido a un accidente, sea o no laboral, el término trabajo habitual se centra en las tareas que estaba ejecutando el trabajador en el momento de sufrirlo».
No obstante, en caso de que se trate de una enfermedad (profesional o no), se entiende como profesión habitual aquella a la que la persona se ha dedicado durante los doce meses anteriores al inicio de la situación de incapacidad temporal; que es un preludio a la situación de incapacidad permanente.
En definitiva, en 2022, la profesión habitual en el caso de la incapacidad permanente total es aquella integrada por las funciones para las que el trabajador se encuentra cualificado
Requisitos generales para la incapacidad permanente total
Para poder ser beneficiario de una incapacidad permanente total se deben cumplir una serie de requisitos generales. Igualmente, también es necesario cumplir determinadas condiciones en función del hecho causante de la incapacidad permanente.
En este sentido, según recoge la normativa en este año 2022, estos son los requisitos generales para acceder a este tipo de prestación:
- Tener menos de 65 años o haber llegado a dicha edad siendo la causa de la incapacidad permanente total una contingencia común pero no cumpliendo los requisitos establecidos para ser beneficiario de una pensión de jubilación contributiva.
- Estar de alta o en situación asimilada de alta en la Seguridad Social.
Respecto a este último requisito, desde la Seguridad Social aclaran que si la incapacidad deriva de accidente de trabajo o enfermedad profesional, y el empresario no hubiera dado de alta al trabajador en la empresa, la Administración realiza un alta automática.
Cuantía de la incapacidad total
La prestación económica a percibir por una incapacidad permanente total se corresponde con el 55% de la base reguladora. Si bien, los profesionales de ‘CampmanyAbogados‘ explican que el cálculo del importe a recibir por la pensión varía según determinados factores.
En concreto, esta variación varía dependiendo si se trata de contingencias comunes, como accidente no laboral o enfermedad común; o de contingencias profesionales, como el accidente de trabajo o la enfermedad profesional.
Por ello, es apropiado calcular la base reguladora para la incapacidad permanente total en función de la fórmula pertinente en cada situación determinada.
Además, a partir de los 55 años, la cuantía de la pensión de incapacidad permanente puede aumentar en un 20%, ya que se entiende que es una edad a la que es más complicado encontrar un nuevo empleo.