Las personas mayores de 65 años pueden acceder a una pensión de jubilación que no es la contributiva de la Seguridad Social, para la que se necesita como mínimo haber cotizado 15 años. Hablamos de la pensión no contributiva de jubilación que gestiona el Instituto de Mayores y Servicios Sociales, conocido como IMSERSO.
Este organismo asegura que la pensión no contributiva de jubilación «asegura a todos los ciudadanos mayores de 65 años y en estado de necesidad una prestación económica, asistencia médico-farmacéutica gratuita y servicios sociales complementarios».
Requisitos para acceder a la pensión no contributiva de jubilación
Las personas mayores de 65 años podrán acceder a la pensión no contributiva de jubilación del IMSERSO aunque no hayan cotizado nunca durante su trayectoria laboral o no cumplen los requisitos para acceder a la pensión contributiva de jubilación de la Seguridad Social.
- Edad: tener sesenta y cinco o más años.
- Residencia: residir en territorio español y haberlo hecho durante un período de diez años, en el período que media entre la fecha de cumplimiento de los dieciséis años y la de devengo de la pensión, de los cuales dos han de ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la fecha de la solicitud.
- Carecer de ingresos suficientes: Existe carencia cuando las rentas o ingresos personales de que se disponga, en cómputo anual para 2025, sean inferiores a 7.905,80 euros anuales.
Si una persona cumple con todos estos requisitos podrá acceder a la pensión no contributiva de jubilación, que es una prestación que no es compatible con la pensión no contributiva de invalidez, con las pensiones asistenciales, con los subsidios de garantía de ingresos mínimos y por ayuda de tercera persona y con la condición de causante de la asignación familiar por hijo a cargo mayor de 18 años y con discapacidad igual o superior al 65%.
Cuantía para acceder a la pensión no contributiva de jubilación
Si hablamos de la cuantía de la pensión no contributiva, debemos destacar que el IMSERSO informa que las pensiones no contributivas de jubilación han tenido un aumento del 9% en 2025. Esto quiere decir, que la cuantía integra es del 7.903,15 euros, marcando un aumento de 652,55 euros con respecto al año pasado. Dicha cuantía se va a dividir en 14 pagas (12 mensuales y dos pagas extras) de 564,51 euros.
El IMSERSO informa en su web que «la cuantía individual actualizada para cada pensionista se establece a partir del citado importe y en función del número de beneficiarios que vivan en el mismo domicilio, de sus rentas personales y/o de las de su unidad económica de convivencia, no pudiendo ser la cuantía inferior a la mínima del 25% de la establecida». Si hablamos de la cuantía de la pensión no contributiva mínima del 25%, la cuantía va a ser de 1.975,79 euros de 2025, que se van a repartir en 14 pagas de 141,13 euros.
A estas cuantía se le puede añadir el complemento para titulares de pensión no contributiva que residan en una vivienda alquilada, que asciende hasta los 525 euros en 2025, siempre y cuando la persona perciba esta pensión.