Las personas que pasan a una situación de paro en España tienen la posibilidad de cobrar la prestación contributiva por desempleo del SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal). Para ello, es preciso cumplir con una serie de requisitos básicos.
Al respecto, desde el SEPE recuerdan que «la prestación contributiva protege la situación de desempleo de quienes pudiendo y queriendo trabajar, pierdan su empleo de forma temporal o definitiva o vean reducida temporalmente su jornada ordinaria de trabajo entre un mínimo de un 10% y un 70%».
Por tanto, si una persona cesa en su actividad laboral por voluntad propia, no tendrá derecho a cobrar la prestación contributiva por desempleo. Todo ello, aunque cumpla con los requisitos de cotización necesarios.
Prestación del paro con dos años cotizados
Uno de los requisitos básicos para cobrar la prestación contributiva del paro es haber trabajado y cotizado al desempleo durante, al menos, 360 días durante los seis años anteriores a la situación legal de desempleo o al momento en el que cesó la obligación de cotizar.
En este sentido, el número de días cotizados al desempleo son claves para determinar el importe y la duración de la prestación contributiva por desempleo para cualquier ciudadano.
Para aquellas personas que han cotizado entre 720 días (dos años) y 899 días (dos años y medio), la duración máxima de la prestación contributiva por desempleo es de 300 días. Así lo determina la normativa actual del SEPE.
La duración máxima de la prestación contributiva por desempleo en España es de 720 días (dos años). Para ello, es obligatorio que el ciudadano haya cotizado al desempleo durante un periodo mínimo de 2.160 días.
Sobre este asunto, los profesionales del SEPE indican que «la duración depende de las cotizaciones por desempleo que hayas realizado en los últimos 6 años anteriores a la situación legal de desempleo o al momento en que cesó la obligación de cotizar, o en su caso, desde el nacimiento del derecho a la prestación por desempleo anterior».
Cuantía de la prestación del paro del SEPE en 2025
Los días cotizados a la Seguridad Social son claves para determinar la duración específica de la prestación contributiva por desempleo. Por su parte, la cuantía de la prestación contributiva del paro depende principalmente de las bases de cotización a la Seguridad Social por contingencias comunes durante los 180 últimos días cotizados. Todo ello, sin tener en consideración las horas extraordinarias.
Cuanto más haya cotizado un trabajador al desempleo más cobrará por la prestación contributiva del paro en cómputo global, ya que percibirá esta prestación durante más tiempo.
Sin embargo, la cuantía de la prestación contributiva por desempleo varía específicamente por las bases de cotización de los 180 últimos días cotizados por parte del trabajador.
En este sentido, desde el SEPE manifiestan que «la base reguladora de la prestación es la media de la base de cotización del periodo indicado. El importe diario que se percibe es el 70% de la base reguladora durante los primeros 180 días de prestación y el 60% a partir del día 181 hasta el final de la misma».
Además de los requisitos de cotización descritos anteriormente, para tener derecho a cobrar la prestación contributiva por desempleo también es necesario cumplir con otros requisitos básicos.
Por ejemplo, es necesario estar en situación legal de desempleo, estar inscrito como demandante de empleo, no haber cumplido la edad de jubilación y no cobrar una pensión de la Seguridad Social.