El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) ha intensificado los controles que se realizan para otorgar una incapacidad permanente. A partir de ahora, el Tribunal Médico deberá estudiar exhaustivamente cada caso para ofrecer la mejor opción a los trabajadores afectados. En 2025, han puesto en marcha nuevos procedimientos de revisión para mejorar el proceso de solicitud.
En concreto, la Seguridad Social ha implantado nuevas herramientas digitales para favorecer el trámite y mejorar las condiciones de solicitud. Además, han potenciado el cruce de datos automatizado con otras administraciones para evitar fraudes y otorgar las ayudas a quienes realmente las necesitan.
Revisiones más estrictas del INSS en 2025
En 2025, el INSS ha mejorado el proceso de solicitud y ha intensificado las revisiones médicas de seguimiento de la incapacidad permanente. En este momento, hay mayor conectividad con bases de datos médicas, laborales y fiscales para detectar posibles inconsistencias entre el estado de salud declarado y la actividad laboral del beneficiario.
Uno de los cambios más destacados es el uso automatizado de herramientas de cruce de datos. Esto permite a la Administración conocer mejor la situación del trabajador afectado, impidiendo que se hagan actividades laborales incompatibles con el grado de incapacidad reconocido.
Asimismo, se revisan informes médicos con mayor regularidad, incluso sin necesidad de requerir presencialmente al pensionista, gracias a las nuevas conexiones entre el sistema sanitario y la Seguridad Social.
Cómo conseguir la pensión de incapacidad
Una de las cosas fundamentales a tener en cuenta, es que el INSS revisa la información médica de forma periódica. Por lo tanto, es importante mantenerla siempre actualizada, incluyendo nuevos datos médicos y profesionales que puedan influir en la percepción de la pensión.
El INSS puede revisar la incapacidad permanente de forma regular, si así lo estima oportuno. Por norma general, estas revisiones pueden programarse cada dos, tres o cinco años, dependiendo del tipo de incapacidad y de la evolución médica prevista.
Para evitar problemas en el futuro, se recomienda conservar una copia de los últimos informes médicos, especialmente los expedidos por especialistas. Además, también es conveniente estar al tanto de cualquier comunicación enviada por el INSS, ya sea por correo postal o notificación electrónica.
Si recibes una notificación del INSS con una cita para una revisión médica, es imprescindible que acudas a la hora y el lugar indicados. De lo contrario, cabría la posibilidad de perder el derecho a percibir la prestación.