El subsidio para mayores de 52 años es una prestación económica gestionada por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), destinada a las personas con 52 años o más (sin alcanzar la edad ordinaria de jubilación) que se encuentran en situación de paro y que han agotado el derecho a percibir la prestación contributiva por desempleo.
Se trata de un subsidio cuya cuantía mensual es equivalente al 80% del Indicador Público de Rentas de Efectos Múltiples (IPREM). En 2022, el importen mensual del subsidio para mayores de 52 años es de 462, 21 euros al mes.
Además, durante la percepción de este subsidio se puede seguir cotizando a la Seguridad Social de cara a la futura pensión de jubilación. Desde el SEPE explican que «la entidad gestora (Servicio Público de Empleo Estatal o Instituto Social de la Marina) ingresará las cotizaciones a la Seguridad Social correspondientes a la jubilación. La base de cotización por jubilación será el 125 % del tope mínimo de cotización vigente en cada momento».
Requisitos del subsidio para mayores de 52 años
Hablamos de un un subsidio especialmente ventajoso para los ciudadanos, puesto que se puede percibir hasta alcanzar la edad ordinaria de jubilación. Si bien, para poder prorrogar el derecho a recibir esta prestación, es necesario seguir cumpliendo los requisitos iniciales.
Así, estos son algunos de los requisitos más importantes para tener derecho a recibir el subsidio para mayores de 52 años:
- Estar en situación de desempleo.
- Haber cumplido 52 años o más.
- Haber agotado el derecho a percibir la prestación contributiva por desempleo.
- Estar inscrito como demandante de empleo durante al menos un mes desde el agotamiento de la prestación contributiva por desempleo. Dicha inscripción debe mantenerse durante toda la percepción del subsidio.
- Suscribir el compromiso de actividad.
- Carecer de rentas de cualquier naturaleza superiores al 75% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) vigente en cada momento; excluida la parte proporcional de las dos pagas extraordinarias.
- Acreditar que en la fecha del hecho causante y en la de la solicitud del subsidio reúne todos los requisitos, salvo la edad, para acceder a cualquier tipo de pensión contributiva de jubilación.
Para poder renovar cada año el derecho a seguir cobrando el subsidio para mayores de 52 años, la persona beneficiaria debe acreditar que cumplen todos estos requisitos que dieron origen a la percepción inicial de la prestación.
Además, es obligatorio presentar ante el SEPE el documento de Declaración Anual de Rentas para acreditar que se siguen cumpliendo los requisitos de carencia de rentas.