La inflación de precios se ha dejado notar en todos los ámbitos. En este caso, los precios energéticos se han situado en máximos históricos y pronto llegarán los días de bajas temperaturas. Así, los expertos indican que es necesario realizar una serie de hábitos que permitan controlar el consumo de gas y ahorrar económicamente en la correspondiente factura.
Según informan desde el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), un 47% del gasto energético total de los hogares se destina a la calefacción. Así, este gasto en calefacción aumenta de manera considerable en los periodos del año de otoño y especialmente en invierno.
Respecto al ahorro de la factura del gas, además de tener contratada una tarifa económica y contar con un buen aislamiento en la vivienda, es necesario prestar atención a tres aspectos claves: Calefacción, agua caliente y cocina.
Ahorrar en calefacción
Primeramente, nos vamos a centrar en hábitos recomendables para ahorrar en el consumo de calefacción, ya que se trata del mayor gasto energético total de los hogares. En este sentido, los expertos de RTVE enumeran los siguientes consejos útiles para el día a día:
- Mantener una temperatura estable: Establecer una temperatura equilibrada entre 18 y 21 grados durante el día, y bajarla entre los 16 y 18 grados por la noche.
- Reducir la temperatura: Bajar los grados del termostato puede ayudar a ahorrar hasta 100 euros al año en la factura del gas.
- Utilizar solo en casos necesarios: Es recomendable utilizar la calefacción únicamente en aquellas habitaciones que se utilicen. De lo contrario, el gasto puede aumentar de forma innecesaria.
- Limpiar los radiadores: Para que un radiador funcione correctamente y podamos ahorrar en su consumo, es apropiado limpiar el polvo unas dos veces al año y purgar el aire.
- Ventilar: Es recomendable ventilar la vivienda durante unos 15 minutos cada mañana.
Por otra parte, suele ser una práctica habitual cubrir los radiadores con ropa húmeda para que se seque más rápido o que se coloque el radiador cerca de muebles. Esto es un error doble, ya que por un lado implica que necesite más energía para calentar la habitación; y por otra parte, también aumenta el riesgo de incendio.
Gas y agua caliente
Respecto al agua caliente, hay que tener en cuenta que a mayor temperatura, mayor será el consumo de gas. En este sentido, para ahorrar en la factura del hogar es recomendable establecer una temperatura adecuada sin que sea demasiado elevada.
Desde la Asociación Española del Gas ‘Sedigas’ recomiendan utilizar el lavavajillas para lavar los platos, ya que hacerlo a mano con agua caliente también aumenta el consumo energético. Es otra de las medidas adecuadas para ahorrar en la factura.
Del mismo modo, también es aconsejable lavar la ropa con agua fría. Existen programas de lavadora que permiten lavar con agua fría y reducir el gasto energético. «Un ciclo a 30° consume tres veces menos energía que un lavado a 90°», informan desde Selectra.
Teniendo en cuenta todo lo expuesto anteriormente, muchos usuarios se preguntarán cuál es la tarifa de gas más interesante respecto a su precio y potencia. Así, desde Facua informan que el precio del kilovatio hora (kWh) de gas con las ofertas del mercado libre se encarece entre un 95 % y un 291 % frente a la Tarifa de Último Recurso (TUR), regulada por el Gobierno.