¡Inocente, inocente! Las calles ya se engalanan para ser testigo de miles de bromas por el Día de los Santos Inocentes, que se celebra cada 28 de diciembre de todos los años. Se trata de una jornada repleta de bromas en la que las personas hacen inocentadas y las reciben, por lo que es, sin duda, un día de alegría y celebración para disfrutar junto a la familia y amigos preparando todo tipo de sorpresas, siempre, claro está, que no sean desagradables.
A nivel de celebrities, también es una jornada en la que muchos famosos son objetos de bromas retransmitidas en televisión, con el fin de celebrar este día y pasar un rato agradable y simpático con todos los espectadores. Es cierto que estas sorpresas oscilan desde las más nobles hasta alguna que otra más cruel, pero siempre manifestando el respeto y el bienestar de la ‘víctima’ para evitar males mayores. De hecho, existen programas que emplean este tipo de festividades de un modo benéfico, en el que todo el dinero que se recaude durante la retransmisión del evento irá destinado a personas necesitadas, especialmente en esta época tan señalada del año.
Origen de Día de los Santos Inocentes
El Día de los Santos Inocentes, pese al jolgorio que caracteriza a esta fiesta en la actualidad, está marcado por la crueldad en su máximo esplendor. De acuerdo con la historia, el origen de esta tradición procede del cristianismo, concretamente en el episodio hagiográfico que narra la matanza de todos los niños nacidos en Belén, Judea, menores de dos años, que fue ordenada por Herodes I ‘El Grande’ en su afán para deshacerse de Jesús de Nazaret.
De este modo, el término de “Santos Inocentes” deriva de que a una edad tan temprana, estos niños no podían haber cometido pecado alguno, además de no presentar los medios necesarios para la defensa propia. Sin embargo, a lo largo de la historia, la celebración fue cambiando y los monaguillos comenzaron a gastar bromas en este día. Una costumbre que pasó después a las familias y se ha ido manteniendo a lo largo de la vida hasta llegar a la actualidad. De hecho, la Iglesia católica celebra este acontecimiento el 28 de diciembre, aunque según el Evangelio de Mateo, la matanza sucedió tras la visita de los Magos al rey, por lo que tendría que ser días después del 6 de enero.
Igualmente, no en todos los países se celebra el Día de los Santos Inocentes en el mismo día. En otros lugares del mundo se celebra el 1 de abril y se conoce con diferentes nombres: en Italia, como ‘Pesce d´aprile’; en Canadá, como ‘Poisson d´avril’; en Portugal y Brasil, ‘Día de Mentira’; y, en Austria, Suiza y Alemania se celebra el ‘Erster April’. Tanto en Australia como en Estados Unidos y Reino unido es el ‘Fool´s Day’.
Inocentadas
En España, el 28 de diciembre ya se ha convertido en todo un clásico de las inocentadas, es decir, es una jornada para gastar bromas simpáticas a amigos y familiares. Sin embargo, esta tradición también está presente en programas y medios de comunicación, que aportan su particular dosis bromista para risas y jolgorio de lectores y espectadores.
Periódicos: es muy común en muchos países que el 28 de diciembre los periódicos publiquen noticias falsas con algún tipo de broma. Muchos lectores llegan a creérsela cayendo en la inocentada.
Televisión: en este día prácticamente todas las cadenas preparan algún tipo de “trampa” en la que cae algún famoso. Casi siempre utilizan cámaras ocultas que convierten al inocente de turno en carne de cañón del 28 de diciembre.
Cambio de hora: Una de las bromas de este día suele ser cambiar la hora de todos los relojes de la casa para que la posible “víctima” llegue tarde al trabajo, al colegio, o esté desorientado.
Monigotes: Colocar un monigote de papel en la espalda de la gente sin que se enteren es una de las inocentadas más recurrentes en esta fecha.