Muchas personas sienten auténtico rechazo por beber agua del grifo. Sin embargo, es posible que debas replantearte este hecho, ya que en la mayoría de zonas de España tomar agua del grifo no requiere ningún problema de salubridad.
Y por otra parte, muchas instituciones advierten de los perjuicios que suponen las botellas de plástico para la naturaleza, animales e incluso para la salud de las personas.
No obstante, en la inmensa mayoría de Europa y América del Norte, el agua de grifo es segura, potable y saludable. Es decir, no contiene microplásticos, metales pesados u otros elementos químicos que supongan un riesgo para la salud.
Beneficios de beber agua embotellada
A pesar de ello, muchas personas en España, Europa y América del Norte optan por beber siempre agua embotellada, como si el agua que sale del grifo generará problemas al organismo o incluso tuvieran un mal sabor. También existen la opción de contratar agua a través de empresas. ¿Eres más de agua embotellada o del grifo?

Por eso, a continuación exponemos cinco motivos por los que deberías beber agua del grifo sin ningún miedo a nada.
Es saludable
El agua que sale del grifo está regida por la normativa emitida por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Es agua potable y por tanto no debe suponer ningún riesgo para la salud. Es igual o más saludable que el agua embotellada.
Además, para que su consumo sea seguro, expertos analizan periódicamente la red de aguas de la zona. En caso de que encuentren algo extraño, están obligados a comunicarlo a la población e intentar subsanar los daños hasta que el agua vuelva a ser segura.
Si aún así sigues teniendo dudas, es recomendable instalar un filtro el grifo de casa, para que el agua salga lo más limpia posible. Además, supondrá un ahorro de tiempo y dinero respecto al agua embotellada.
Ahorras dinero
Respecto al ahorro, el agua procedente del grifo cuesta en torno a 0,16 céntimos por litro según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). Sin embargo, el agua embotellada tiene un precio de 0,20 céntimos por litro.
Según los expertos, beber agua del grifo en casa puede suponer un ahorro de dinero de 550 euros al año, a diferencia de beber agua embotellada.
Evitas el desplazamiento
A no ser que exista un corte de agua por motivos excepcionales, un grifo es una fuente inagotable de agua en cualquier hogar. Así, si bebes agua del grifo evitarás tener que salir regularmente a comprar agua embotellada.
Por lo tanto, beber agua del grifo genera comodidad y evita salir de casa cada cierto tiempo a comprar agua. Algo especialmente molesto durante los días de verano, cuando se registran altas temperaturas.
Buen sabor
Dependiendo de la zona de España, el agua del grifo presenta diferentes sabores. No obstante, todas tienen una alta calidad y generalmente un sabor aceptable para cualquier persona.
Si vives en una zona donde el sabor del agua del grifo es un poco desagradable, apuesta por implantar un filtro de agua en dicho grifo. La diferencia es significativa.
Cuidado del medio ambiente
Otro aspecto es el cuidado al medio ambiente. Para muchas personas puede ser un elemento secundario, pero beber agua del grifo evita el consumo de botellas de plástico. Y es que menos del 10% de plástico que se produce a escala mundial es reciclado.
Por todos estos motivos debes ir olvidando la idea de que el agua del grifo no es saludable. Si prefieres beber agua embotellada por un sabor en particular, es tu elección. Pero recuerda, que de esta forma podrías contribuir al cuidado del medioambiente.