Ha llegado el cambio de hora. Esta madrugada, a las 02.00 am los relojes se han cambiado a las 03.00 am, y si aún no lo has cambiado, ponte a ello, porque estás viviendo en una hora equivocada. También es posible que te hayas levantado más tarde e incluso que te sientas más cansado, pues el efecto más inmediato, es que nos han quitado una hora de sueño y este domingo, solo durará 23 horas. Así que aprovecha el tiempo, porque se trata del fin de semana más corto del año, y eso no se recupera… Hasta el próximo cambio de hora.
Cabe recordar, que son dos los cambios de hora que se viven cada año. El primero, el que sucede el primer fin de semana de marzo y que da paso al horario de verano, al que acabamos de entrar. Y el segundo, el que sucede el último fin de semana de octubre y que da paso al horario de invierno, para el que aún quedan seis meses. Unos cambios que según explican diversos estudios, tienen un efecto, en muchos casos negativos, sobre el ser humano.
Principales efectos del cambio de hora
Son muchas las voces que desde hace años piden que se ponga fin a este sistema de cambio de hora. El principal motivo es el efecto que tiene sobre el ser humano, y es que en muchos casos, afecta a la salud de forma negativa. En este sentido, el principal efecto que señalan los psicólogos, es en la alteración del sueño. Esto significa, que es probable que durante un tiempo, sean muchas las personas que encuentren dificultad para dormir.
Esto se debe a que el cambio de hora produce una alteración en la secreción de melatonina, una hormona que actúa regulando los estados de vigilia y sueño en función de la luz solar: a más luz se produce menos melatonina, por lo que la función de inducir el sueño que tiene esta hormona se produce de forma más tardía. Este fenómeno se une al hecho de que la rutina no cambia de hora, es decir, todos seguimos con nuestros hábitos a pesar del cambio.
Por tanto, para el organismo, nos levantamos una hora antes, por lo que se rompe la rutina del sueño. Según los expertos, el efecto es similar al que se produce cuando viajamos a zonas con otro uso horario y sufrimos lo que se conoce como ‘jet-lag’. Por tanto, es normal que durante unos días te encuentres más cansado, irritable e incluso puedas sufrir episodios de fatiga que conlleven un estrés añadido al de la rutina habitual, algo que afecta especialmente a personas mayores y niños.
Recomendaciones para evitar pasarlo mal por el cambio de hora
Los efectos de este cambio de hora pueden ser especialmente significativos. Por una parte, porque altera, como hemos visto, nuestra rutina. Ese ajuste de hora provoca que perdamos una hora de sueño que nos pueda afectar. Además, se junta con un inicio de primavera que aunque oficialmente lleva una semana, los cambios de tiempo puede provocar que para las personas alérgicas, los síntomas se incremente sumando un mal estar mayor.
Pero, ¿Qué podemos hacer? En el caso de uno de los sectores vulnerables, el de los niños, los psicólogos recomiendan ir cambiando la rutina poco a poco. De hecho, lo ideal es empezar unos días antes acostándolos más temprano hasta llegar poco a poco al horario nuevo. Pero si no se ha hecho, aún puede modificarse yéndose a dormir antes y poniéndoles oscuridad, y despertándolos por las mañanas con más luz para que el ritmo circadiano se acostumbre al nuevo horario.
En el caso de los adultos, también puede funcionar adaptar la rutina al nuevo horario poco a poco, pero además, es recomendable evitar factores excitantes como el café, el tabaco y el alcohol durante la tarde y sobre todo, antes de dormir.