Algunos pensionistas de España están exentos de pagar por los medicamentos que necesitan para tratar su estado de salud. Si bien, la mayoría tiene derecho a descuentos en el precio de los medicamentos, debido al hecho de cobrar una pensión contributiva del sistema español.
Este hecho se conoce como copago farmacéutico. Es decir, consiste en una medida que recoge la cantidad que deben pagar los ciudadanos por la adquisición de determinados medicamentos o fármacos.
Se trata de una medida que todavía genera ciertas dudas entre los ciudadanos, especialmente, entre los pensionistas. Normalmente, las personas mayores de 65 años necesitan consumir ciertos medicamentos prácticamente a diario.
Pensionistas y pagos de medicamento
Actualmente, en España, más de 6 millones de ciudadanos no tienen la obligación de pagar por medicamentos. Muchos de estos ciudadanos tienen la condición de pensionista.
Si bien, hay que tener en cuenta que no todos los fármacos son gratuitos. En algunos casos particulares, el usuario debe pagar un porcentaje entre el 10% y 60% de su precio. Todo ello, a pesar de que España cuente con una sanidad pública y gratuita.
Los pensionistas de España tienen derecho a diferentes beneficios sociales y fiscales, debido a su condición de pensionista. Si bien, algunos de estos beneficios pueden variar en función del tipo de pensión a percibir.
Con todo ello, la finalidad del copago de medicamentos es ofrecer una ayuda directa para los pensionistas y jubilados que tengan un poder adquisitivo más reducido. Por tanto, la cuantía de la pensión y el nivel de ingresos juega un papel clave en este sentido.
A partir de ahí, el Sistema Público de Salud establece un control sobre cada ciudadano y/o pensionista en relación a los gastos asociados al copago farmacéutico que recoge la normativa de la Seguridad Social.
Pago de medicamentos
Según la normativa actual, las personas que cobran una pensión y tienen ingresos inferiores a 5.635 euros, están exentas del pago de medicamentos y fármacos. Del mismo modo ocurre con las personas exentas de presentar la Declaración de la Renta y que presenten unos ingresos por debajo de 11.200 euros.
En el caso de pensionistas con ingresos inferiores a 18.000 euros, tendrán que pagar un 10% de dichos medicamentos, con un máximo de pago de 8,23 euros al mes. Si los ingresos se sitúan entre 18.000 y 100.000 euros, también deben abonar un 10%, aunque en este caso el límite alcanza 18,52 euros.
Finalmente, los pensionistas con ingresos superiores a 100.000 euros, tendrán la obligación de abonar un 60% del precio del medicamento. Para este tipo de situaciones, el límite mensual es de 61,75 euros.
Además, de los pensionistas descritos anteriormente, también están exentos del copago farmacéutico los siguientes grupos sociales.
- Personas menores de edad que tengan reconocida una discapacidad igual o superior al 33%.
- Beneficiarios de la prestación por hijo o menor a cargo en régimen de acogimiento familiar.
En definitiva, no todos los pensionistas tienen los mismos derechos respecto al copago farmacéutico. Así, uno de los factores más influyentes se encuentran en el nivel de rentas de los pensionistas.
Como conclusión, los profesionales de BBVA recuerdan que «como hemos comentado anteriormente, no pagan nada por los medicamentos con receta, los pensionistas con rentas inferiores a 5.635 euros anuales, y los pensionistas que no estén obligados a presentar la declaración de la renta y que tengan una renta anual inferior a 11.200 euros».