Las pensiones no contributivas del IMSERSO (Instituto de Mayores y Servicios Sociales) subirán por encima del IPC en 2025. Por su parte, las pensiones contributivas aumentarán en función del IPC interanual de 2024, con una subida del 2,8%.
Entre las pensiones no contributivas del IMSERSO encontramos la pensión no contributiva de jubilación y la pensión no contributiva de invalidez. Para ambas se aplicará la misma revalorización en 2025. Un aumento que será superior a 200 euros al año.
Subida de las pensiones no contributivas del IMSERSO en 2025
Actualmente, la normativa de la reforma de pensiones contempla mejoras adicionales en las pensiones no contributivas para igualarse al umbral mínimo de pobreza. Por ello, en 2024, las pensiones no contributivas del IMSERSO se revalorizaron en un 6,9%. Se trata de un porcentaje considerablemente mayor en relación al aumento del 3,8% que se aplicó en las pensiones contributivas.
Del mismo modo, en 2025, las pensiones no contributivas subirán adicionalmente por encima del IPC hasta alcanzar el 0,75% del umbral de riesgo de pobreza para un hogar unipersonal. Hablamos de una subida importante para este tipo de pensiones, que actualmente cuentan con un importe anual de 7.250,60 euros al año.
Debido a esta subida adicional, las cuantías garantizadas del Ingreso Mínimo Vital (IMV) también tendrán un aumento considerable en 2025. Todo ello responde a que las cuantías garantizadas del IMV están referenciadas al importe de las pensiones no contributivas.
Las pensiones no contributivas del IMSERSO están destinadas a personas que no han cotizado lo suficiente y que se encuentran en situación de vulnerabilidad económica. A diferencia de las pensiones contributivas, para tener derecho a percibir una pensión no contributiva no es necesario cumplir con ningún requisito de cotización.
No obstante, es obligatorio cumplir con otros requisitos establecidos por el IMSERSO. En este sentido, existen requisitos específicos para las pensiones no contributivas de jubilación y requisitos concretos para las pensiones no contributivas de incapacidad.
Subida de más de 200 euros anuales
Actualmente, la pensión no contributiva de jubilación tiene un importe anual de 7.250,60 euros al año. Supone una cantidad de 517,90 euros al mes, debido a que este tipo de pensión del IMSERSO se devenga en 14 pagas al año. Del mismo modo ocurre con la pensión no contributiva de incapacidad.
Si se aplicase una subida del 2,8%, la cuantía de las pensiones no contributivas tendrían un aumento de 203 euros anuales. Es decir, hablaríamos de un nuevo importe de 7.453,60 euros anuales.
No obstante, la revalorización que se aplicará a las pensiones no contributivas será superior al IPC. Por tanto, los pensionistas que reciben una pensión no contributiva tendrán una subida mayor a 203 euros anuales. Está previsto que en las próximas semanas el Gobierno de España informe sobre la revalorización específica que se activará en las pensiones no contributivas del IMSERSO.
En cualquier caso, desde el IMSERSO recuerdan que «los pensionistas de pensión no contributiva de invalidez cuyo grado de discapacidad sea igual o superior al 75% y acrediten la necesidad del concurso de otra persona para realizar los actos esenciales de la vida, percibirán además un complemento del 50%».
Los pensionistas beneficiarios de una pensión no contributiva de incapacidad también tendrán un importante aumento sobre la cuantía de su prestación en el año 2025. Del mismo modo, también se producirá la revalorización correspondiente en el complemento para las personas que acreditan una discapacidad igual o superior al 75%.