El sistema español de pensiones también contempla un tipo de pensión al que se puede acceder sin haber cotizado nunca a la Seguridad Social. Se trata de la pensión no contributiva (PNC) de jubilación y la pensión no contributiva de invalidez. La gestión de las PNC recae en el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO).
Para cobrar una pensión no contributiva en España también se deben cumplir determinados requisitos, relacionados con la residencia en España o con el nivel de rentas. Sin embargo, el IMSERSO no solicita ningún requisito de cotización previa para acceder a este tipo de prestaciones, cuyas cuantías son inferiores a las pensiones contributivas.
En concreto, la cuantía de las PNC se fijan cada año en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) por parte del Gobierno de España. En este sentido, los beneficiarios de estas pensiones tendrán un aumento anual de 900 euros. Se trata de una excelente noticia para las miles de personas que perciben una prestación de este tipo en España.
¿Cuánto suben las PNC en 2023?
En teoría, las pensiones no contributivas se revalorizan en función del IPC del año anterior, al igual que ocurre con las pensiones contributivas. No obstante, el Ejecutivo Central tiene potestad para aumentar el porcentaje de aumento correspondiente, siempre que se apruebe por votación en el Congreso de los Diputados y el Consejo de Ministros.
Así, en 2022 las pensiones no contributivas aumentaron un 3% con respecto a las cuantías del año 2022. De esta forma, se estableció una cuantía íntegra de 421,40 euros al mes, que supone un importe anual de 5.899.60 euros.
Sin embargo, durante la primera mitad del año 2022 se registró una importante subida de precios por la inflación. Esta situación llevó al Gobierno de España a tomar diferentes medidas anticrisis al respecto. Por ello, aprobó una subida del 15% respecto a las cuantías de las pensiones no contributivas. Esta medida se acordó desde julio de 2022 a diciembre de 2022.
Para el nuevo año 2023 se esperaba que la cuantía de las pensiones no contributivas se volvieran a regir por la revalorización de pensiones en función del IPC del año anterior, tal y como ocurrirá con las pensiones contributivas (subida del 8,5%). No obstante, el Gobierno de España ha llegado a un acuerdo con EH Bildu para que las pensiones contributivas se revaloricen un 15% con respecto a las cuantías iniciales del año 2022.
Una subida de 900 euros anuales
La subida del 15% provocará que se mantenga la medida anticrisis aprobada por el Gobierno de España durante todo el año 2023. Así, se pasará de percibir 421,40 euros al mes a 484,61 euros al mes. Por su parte, la cuantía anual sube de 5.899,60 euros a 6.784,60 euros.
Se trata de una subida mensual de 63,21 euros en 2023, con respecto a las cuantías iniciales de las pensiones no contributivas en el año 2022. Con todo ello, las personas beneficiarias de una pensión no contributiva de jubilación o invalidez recibirán 884 euros más al año. Es decir, casi 900 euros más con respecto al año 2022.
Esta medida provocará un importante beneficio para las personas beneficiarias de este tipo de prestaciones, ya que durante los primeros meses del año 2023 también se espera una inflación de precios importante, junto a otros factores como el incremento del Euríbor.