Para acceder a la pensión contributiva de jubilación de la Seguridad Social se necesita haber cotizado un mínimo de 15 años. Pero la pregunta de muchas personas es la siguiente: si he cotizado menos de 15 años o no he cotizado nunca, ¿puedo acceder a una pensión de jubilación? La respuesta es sí, a través de la pensión no contributiva de jubilación del Instituto de Mayores y Servicios Sociales, conocido como IMSERSO, ya que esta pensión no tiene ningún requisito de cotización.
Este tipo de pensión ha tenido un aumento del 9% de cara a 2025, como ya recogió el Boletín Oficial del Estado (BOE). Esta subida es mucho más mayor que la que ha tenido la pensión contributiva de jubilación, del 2,8%, debido a que el objetivo es que no haya tanta diferencia entre un tipo de pensión.
Requisitos para acceder a la pensión no contributiva de jubilación para 2025
Si hablamos de la pensión no contributiva de jubilación, debemos de tener en cuenta que esta prestación «asegura a todos los ciudadanos mayores de 65 años y en estado de necesidad una prestación económica, asistencia médico-farmacéutica gratuita y servicios sociales complementarios». Todo ello a pesar de que la persona no haya cotizado nunca o lo haya hecho de forma insuficiente para acceder a dicha pensión contributiva.
Entre los requisitos que debe de cumplir una persona para acceder a esta prestación encontramos:
- Edad: tener sesenta y cinco o más años.
- Residencia: residir en territorio español y haberlo hecho durante un período de diez años, en el período que media entre la fecha de cumplimiento de los dieciséis años y la de devengo de la pensión, de los cuales dos han de ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la fecha de la solicitud.
- Carecer de ingresos suficientes: Existe carencia cuando las rentas o ingresos personales de que se disponga, en cómputo anual para 2025, sean inferiores a 7.905,80 euros anuales. No obstante, si las rentas o ingresos personales son inferiores a 7.905,80 euros anuales y se convive con familiares, únicamente se cumple el requisito cuando la suma de las rentas o ingresos anuales de todos los miembros de su unidad económica de convivencia, sean inferiores a las cuantías que recoge el IMSERSO en su web.
En este sentido, debemos de tener en cuenta también que la pensión no contributiva de jubilación es incompatible con la pensión no contributiva de invalidez, con las pensiones asistenciales, con los subsidios de garantía de ingresos mínimos y por ayuda de tercera persona o con la condición de causante de la asignación familiar por hijo a cargo mayor de 18 años y con discapacidad igual o superior al 65%.
Cuantía de la pensión no contributiva de jubilación para 2025
Como bien hemos adelantando, las pensiones de tipo no contributiva, ya sea de invalidez o de jubilación, va a aumentar su cuantía en un 9% en 2025. De esta manera, las cantidades que perciben los pensionistas se verán modificadas a partir del mes de enero de 2025. En 2024 la cuantía estaba fijada en 7.250,60 euros anuales, divididos en 14 pagas (12 mensuales y dos pagas extras) de 517,90 euros. Para 2025 su incremento va a ser de 652,55 euros, fijando la cuantía íntegra en 7.903,15 euros, que se va a dividir en 14 pagas de 564,51 euros.
Desde el IMSERSO apuntan que «la cuantía individual actualizada para cada pensionista se establece a partir del citado importe y en función del número de beneficiarios que vivan en el mismo domicilio, de sus rentas personales y/o de las de su unidad económica de convivencia, no pudiendo ser la cuantía inferior a la mínima del 25% de la establecida».
Si hablamos de la cuantía mínima del 25%, en 2024 estaba fijada en 1.812,65 euros anuales, que se dividían en 14 pagas de 129,48 euros. De cara al nuevo año, y con la subida que hemos mencionado a lo largo del texto, la cuantía de esta pensión no contributiva de jubilación mínima del 25% será de 1.975,79 euros, que se reparte en 14 pagas de 141,13 euros.