Otro nuevo milagro más en la interminable lista del doctor Pedro Cavadas. Esta vez, el doctor ha devuelto la capacidad de andar a un joven asturiano de 23 años tras una complicada operación.
Enol Jordán Castaño, jamás imaginaría que después de pasarse toda la vida en su silla de ruedas, un día podría volver a recuperar el andar. El joven nació con el síndrome de Warkany, una enfermedad conocida como trisomía 8 que provoca malformaciones en distintos órganos. En este caso, la enfermedad afectó los tendones de Enol, que no crecían al mismo ritmo que el resto del cuerpo.
Este joven asturiano parecía que se pasaría toda la vida sufriendo unos «dolores terribles» y postrado en una silla de ruedas. De hecho, fue en el año 2010 cuando de un plumazo se le quitaron todas las esperanzas de poder volver a caminar. Tras ser intervenido en el Gregorio Marañón de Madrid, los médicos le dieron la noticia de que no podría volver a andar nunca más.
Pese a la durísima noticia por parte de los médicos, esta familia asturiana no perdió la esperanza y ocho años después conocieron al doctor Cavadas. Según cuenta para «El Comercio», Rosana Castaño, madre de Enol, en el verano de 2018 conocieron la noticia de que el médico valenciano había operado a un joven tetrapléjico al que se le logró unir la columna vertebral a la pelvis usando el hueso del peroné.
Cavadas devolvió la esperanza a la familia
Este caso arrojó un halo de luz de esperanza a la familia, que rápidamente se pusieron en contacto con Cavadas. Durante la primera cita, el médico se mostró muy optimista y prometió que Enol volvería a andar: «Es fácil: se cambia la musculatura de atrás a adelante, se coloca la rótula en su sitio, que está desviada, rehabilitación y a caminar».
Fue en 2019 cuando Enol fue operado en tres ocasiones por Cavadas en el hospital de Manises, centro donde trabaja el doctor valenciano. Tras las operaciones, se entró en el terreno de la rehabilitación, donde poco a poco Enol comenzó a no depender de la silla de ruedas hasta que hace dos meses comenzó a nadar por su propio pie sin necesidad de ayuda y con tan solo una muleta.
En el mes de noviembre, el joven volverá a Valencia con la ilusión de recibir el alta definitiva tras ser visitado por Pedro Cavadas. Una vez más, el doctor hace gala de su apodo «doctor milagro» y ha devuelto no solo el andar, sino la ilusión y las ganas a este joven.