Los vecinos del minicipio de Maó en Menorca se encontraron con una gran sorpresa al volver a sus vehículos. Y es que un «papel» rosa asomaba por sus limpiaparabrisas creyendo que era una multa de la policía local. ¿Pero qué he hecho mal?, se preguntarían todos los «inocentes» de esta genial campaña por el Día Internacional de la Discapacidad.
Esta multa fake forma parte de una campaña impulsada por el Ayuntamiento de Maó para concienciar sobre la necesidad de hacer un uso adecuado de las plazas de estacionamiento azules. Lo normal hubiese sido que se le notificara con esta multa a aquellos que no respetaban los aparcamientos de personas con movilidad reducida, pero lo sensible de esta campaña ha sido todo lo contrario, felicitar a quienes si lo hacían bien. El importe, «1.000 gràcies».
En el propio vídeo que sube a sus redes el Ayuntamiento de Mao se muestra las caras de sorpresas e incluso algunas lágrimas al ver, que un simple hecho de solidaridad y respeto por los demás, hacen un gran bien y no dificultan la vida de las personas que necesitan de este espacio para poder tener mayor autonomía.