Los jugos o zumos son un alimento ideal para incorporar diferentes propiedades indispensables al organismo, tales como vitaminas o minerales. Así, durante la infancia es habitual que los más pequeños consuman este tipo de productos.
Cuando acudimos a un supermercado encontramos una gran variedad de jugos exprimidos, concentrados, con leche o incluso néctares. A simple vista, todos los productos parecen similares, aunque si profundizamos en sus ingredientes y valor nutricional, las diferentes son considerables.
Teniendo en cuenta este tipo de aspectos, desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), han realizado un análisis de hasta 97 zumos diferentes para ayudar a elegir a los consumidores cual de estos jugos es más saludable para su ingesta.
Dicho proyecto ha sido subvencionado por el Ministerio de Consumo, aunque la responsabilidad del contenido de este análisis es responsabilidad absoluta de la OCU.
Diferencias entre jugo y el consumo de fruta
La mayoría de jugos están compuestos por frutas, como naranja, manzana, piña o melocotón. En este sentido, muchas personas tienen la creencia de que tomar un zumo es similar a tomar una pieza de fruta. Sin embargo, desde la OCU rechazan esta idea.

Es decir, no es lo mismo tomar una naranja que un zumo de naranja. Por norma general, un jugo contiene mayor cantidad de azúcar y menos cantidad de fibra.
Esto se explica porque para obtener un jugo de unos 200 ml de utilizamos entre dos y tres naranjas. Por lo tanto, el contenido de azúcar del zumo siempre será superior a consumir una sola naranja. Son diferencias que hay que tener en cuenta a la hora de analizar los diferentes jugos.
«En un zumo, la presencia de fibra es prácticamente nula y los azúcares se encuentran libres en el medio, mientras que una pieza de fruta contiene toda su fibra y los azúcares están embebidos dentro de la estructura de la propia fruta, por lo que el pico de glucemia está mucho más atenuado», recoge el informe realizado por la OCU.
Los mejores jugos
Después de un profundo análisis y comparación entre 97 zumos diferentes, la Organización de Consumidores y Usuarios resalta cuáles son las características idóneas que debe contener un zumo, en función de criterios nutricionales y de calidad del producto:
- Primeramente, los jugos de calidad deben ser de fruta al 100%. Esta es una característica que se cumple únicamente en los zumos exprimidos y jugos a partir de concentrado.
- Deben estar libres de aditivos.
- No deben llevar azúcares ni edulcorantes añadidos. Se trata de un requisito común en los zumos exprimidos y jugos a partir de concentrado.
- Qué esté sometido al mínimo procesamiento posible. Esta condición únicamente está presente en los zumos naturales exprimidos.
Finalmente, aunque parezca sorprendente, desde la OCU no destacan la presencia de vitaminas como un valor añadido de los zumos; más allá de la vitamina C o la vitamina A. Como conclusión, desde la OCU afirman que «las vitaminas A, C y E están presentes de forma natural en otros alimentos de consumo habitual, con mucho más interés nutricional que estos zumos y bebidas».