El Boletín Oficial del Estado (BOE) ya recoge la primera pata de la reforma de pensiones acordada entre el Gobierno de España y los diferentes agentes sociales. Así, todas estas medidas entrarán en vigor a partir del sábado 1 de enero de 2022.
Entre las medidas de esta reforma de pensiones destaca el nuevo mecanismo de revalorización de pensiones en función del IPC, incentivos a la jubilación demorada y el fin del llamado factor de sostenibilidad que nunca llegó a entrar en vigor.
Además, a partir del 1 de enero de 2022, la edad de jubilación ordinaria para acceder al 100% de la pensión de jubilación será de 66 años y dos meses para las personas que hayan cotizado durante su vida laboral menos de 37 años y seis meses.
Las medidas más destacadas en la reforma de pensiones
Como ya hemos adelantado, las principales medidas aprobadas en la primera reforma de pensiones entrarán en vigor a partir del sábado 1 de enero de 2022:
- Revalorización de pensiones en función del IPC del año anterior. Esta medida se aplicará por primera vez en 2022 y tendrá vigencia en los próximos años. En 2022, la subida para las pensiones contributivas será del 2,5%.
- Medidas para acercar de forma voluntaria la edad efectiva a la edad ordinaria de jubilación. Se aplicarán nuevas normativas en relación a la jubilación activa, jubilación forzosa, jubilación activa y revisión de la jubilación anticipada tanto voluntaria como involuntaria, y por razón de actividad.
Estos son los dos aspectos más importantes a tener en cuenta en la primera pata de la nueva reforma de pensiones, que entra en vigor este sábado 1 de enero de 2022.
Concretamente, en el caso de la jubilación anticipada voluntaria, los coeficientes pasan a ser mensuales con el objetivo de dar mayor flexibilidad a futuros pensiones y fomentar un desplazamiento voluntario de la edad de acceso a la jubilación. Se da un tratamiento más positivo a las personas con largas carreras de cotización.
Por otra parte, los coeficientes reductores relacionados con adelantas la edad de jubilación se aplican directamente sobre el importe de la pensión y no sobre la base reguladora, como se venía realizando hasta el momento.
Incentivos a la jubilación demorada
En cuanto a la jubilación demorada, la nueva normativa señala la exoneración de cotizar por contingencias comunes, a excepción de por incapacidad temporal; todo ello desde el cumplimiento de la edad ordinaria de jubilación que corresponda. Es una forma de potenciar el acceso a esta modalidad de jubilación.
Además, la nueva reforma de pensiones contempla una serie de incentivos para favorecer la jubilación demorada entre la población. Los ciudadanos tendrá la opción de seleccionar un porcentaje adicional del 4%. Se trata de una cantidad a tanto alzado que oscila entre un mínimo de 4.800 euros y un máximo de 12.060 euros, en función de la cuantía de la pensión o una combinación de ambas.
Todo lo que debes saber sobre el MEI
En esta primera pata de reforma de pensiones también se incorpora el llamado Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), que comenzará a aplicarse a partir de 2023.
Concretamente, el MEI cuenta con dos componentes claves. El primero se basa en la reactivación del Fondo de Reserva de la Seguridad Social a través de una aportación finalista entre 2023 y 2032, año fijado para las pensiones del ‘baby boomer‘.
La aportación finalista consistirá en un aumento de la cotización a la Seguridad Social en 0,6 puntos porcentuales por contingencias comunes. Así, un 0,5 será obligación de la empresa, y 0,1 puntos será responsabilidad del trabajador.
En este sentido, si no fuera necesaria la utilización del Fondo de Reserva de la Seguridad Social llegado el momento, el Gobierno plantea utilizar el dinero acumulado para mejorar la cuantía de las futuras pensiones o reducir las cotizaciones sociales.