La OCU ha publicado un estudio en el que muestra que la sal es un componente necesario en nuestra alimentación. Desde esta organización sin ánimo de lucro, se ha hecho un balance sobre por qué es bueno consumir sal, la cantidad necesaria y cómo controlar esa ingesta en nuestra dieta. Una información que han considerado necesaria por la discriminación que este alimento está sufriendo en los últimos años, sin ser tan perjudicial como se puede llegar a pensar.
Existe una tendencia actual en la que consumir sal es casi prohibitivo. Se cocina soso, se compran productos sin sal y en definitiva, se ha situado este producto como absolutamente perjudicial. Pero, ¿Realmente es así? La verdad es que no. Aunque hay que controlar su consumo, lo cierto es que el sodio que contiene la sal, es un nutriente esencial que permite al organismo mantener el equilibrio iónico y retener el agua para conseguir un buen nivel de hidratación.
No obstante, debemos tener en cuenta que este perjuicio ante la sal, tiene una cierta base real. El consumo excesivo de este producto puede acarrearnos problemas de salud. Pero lo que la OCU viene a decirnos, es que como en la mayoría de los casos, es importante conocer los pros y los contras de la ingesta de ciertos alimentos, y aprender a incluirlos en nuestra dieta de manera sana. Para ello, es importante identificar la cantidad de sal que podemos consumir al día.
Esta es la cantidad de sal que debemos consumir a diario según la OCU
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) se ha hecho eco de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en cuanto al consumo de sal. Desde esta institución internacional, afirman que es necesario un consumo mínimo de 3 gramos diarios, siendo 5 gramos lo ideal para ingerir en un día. Esto significa, que para mantener una dieta sana, los adultos no deberían superar lo equivalente a una cucharadita de café.
El problema viene en los datos que reflejan la realidad. Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), los españoles tomamos casi 10 gramos al día. Esto significa que tomamos el doble de sal de lo recomendado por la OMS. Si damos estos datos por ciertos, la ingesta de sal sí es perjudicial y debemos controlarla en nuestro día a día. Pero, ¿Cómo podemos hacerlo?
Controlar que tomamos una cucharadita pequeña de sal añadida es fácil. Hablamos de ‘sal añadida’ a la que nosotros le echamos a los alimentos. El problema viene en cómo controlar la ‘sal oculta’. Esta es la que traen ciertos productos ya incorporada y que no podemos controlar. De hecho, esa sal debe entrar en el cupo de los 5 gramos diarios recomendados por la OMS.
Por este motivo, la OCU ha publicado un listado con los alimentos que solemos consumir a diario y el porcentaje de sal que suelen llevar. De este modo, será más fácil que a partir de ahora, controles de manera más exacta la sal que consumes a diario y la ajustes, si fuera necesario. Estos productos son:
- 27% carnes y derivados, en especial, los embutidos.
- 26% cereales y derivados, sobre todo el pan.
- 14% productos lácteos, en particular el queso.
- 13% platos preparados.
- 6% pescados y mariscos, donde destacan las conservas.
- 4% productos de aperitivo.
- 3% salsas y condimentos;
- 2% productos dulces.