Si hubiese que elegir entre comer jamón ibérico o lomo ibérico, el criterio no debería ser lo que engorda. Y es que hay otro muchos factores más importantes y relevantes que este. Por ejemplo, el gusto de cada persona. Pues ¿De qué sirve comer algo que no vamos a disfrutar?. Pero si se quiere elegir en base a un criterio de peso, podemos entrar en averiguar que producto es más sano para nuestro organismo.
Y es que si partimos de la pregunta de ¿Qué embutido engorda menos para comer en Navidad? La respuesta es sencilla: Todos y ninguno. Es decir, todo alimento aporta a nuestro cuerpo una serie de calorías. Lógicamente, en este caso la duda se enfoca precisamente a averiguar cuál es el menos calórico. Y si es desde un punto de vista saludable, sí podemos entrar en valorar cada alimento para hacer una cena de Navidad rica y sana.
Porque no, no es incompatible. Bien es cierto que estas fechas nos invitan a consumir una serie de productos que no son de lo más saludables. Pero es sobre todo, en el momento postres, donde se nos da esta circunstancia. No obstante, no hay que castigarse. Lo importante es disfrutar los días señalados y seguir con una alimentación rica y variada el resto de días.
Por tanto, en la parte ‘salada’ de cada comida de Navidad, es fácil mantener el equilibrio entre los tradicional y lo saludable. En el caso de los embutidos, no deben ser el centro de nuestra alimentación. Sin embargo, es habitual que estos días, alimentos como el jamón ibérico o el lomo ibérico se consuman más habitualmente y además, en más altas cantidades que de costumbre. Pero si tenemos que elegir, ¿Cuál es el más saludable?
¿JAMÓN IBÉRICO O LOMO IBÉRICO?
Antes de tener que elegir, debemos dejar claro que tanto el jamón ibérico como el lomo ibérico, son de los embutidos más sanos que podemos encontrar en el mercado. Y es que según señalan los expertos en nutrición, el hecho de que sea carne magra ya demás, ibéricos, les aportan una mejor calidad. Es decir, es de las carnes en este formato, más saludables que podemos consumir.
Pero, ¿A qué nos referimos cuando hablamos de embutidos? Estos productos se catalogan así porque son alimentos cárnicos pero que han sido procesados. Esto significa, que por saludables que sean, siempre se van a situar dentro de los alimentos que se deben consumir de forma ocasional. Sin embargo, aun en una misma categoría, existen jerarquías.
Así pues, podemos afirmar que tanto el jamón ibérico como el lomo ibérico, son de las mejores opciones que se pueden elegir. ¿El motivo? Al ser ibérico, nos indica que el proceso de crianza del animal así como su producción ha sido de la forma más sana y natural. Por si esto fuera poco, son de los embutidos que menos grasa tienen, lo cual lo hace mejor opción a la hora de cuidar nuestro organismo.
¿CÓMO ELEGIR?
En base a lo anteriormente comentado, parece innecesario tener que elegir entre el jamón y el lomo ibérico. Pues en realidad, son dos productos cuyas ventajas son similares. Por tanto, parece lógico pensar que la elección se deje al gusto de quien vaya a consumirlo. De hecho, siempre que esté dentro de una dieta equilibrada y su consumo sea ocasional, no hay hay grandes diferencias entre un producto a otro.
No obstante, si quieres definir tu elección en base a lo calórico o graso que sea, debes saber que el jamón ibérico suele tener un porcentaje de grasa en torno al 20 por ciento y el lomo ibérico en torno al 15. Esto significa, que apurando en la necesidad de tener que elegir, si tu criterio está basado en este dato, el embutido más saludable del mercado es el lomo ibérico. Sin embargo, la diferencia no es tan grande como para tener que elegir en base solo a esto.