Eliminar los malos olores del baño siempre se ha convertido en una tarea difícil para cualquier familia. Además diferentes productos que podemos encontrar en el mercado, podemos utilizar otros ingredientes que podemos encontrar en la propia cocina como el bicarbonato de sodio, que además de los beneficios para la salud, tienes otras funciones.
Si no encuentras solución a los malos olores, hoy te contamos una fácil solución con solo dos ingredientes. Aunque es cierto que muchas veces estos malos olores vienen por problemas de construcción y desagües, eso no evita que, cuando todo esté correcto, el baño huela a veces a cerrado o a poco limpio.
Remedio casero para eliminar los malos olores en el baño
Para eliminar los malos olores del baño de forma fácil, rápida y económica, solo requieres dos ingredientes: vinagre y bicarbonato de sodio. La fórmula solo trata de mezclar vinagre con bicarbonato.
Una vez que hayamos hecho la mezcla, dejamos reposarla en el baño durante varias horas y más tarde, la retiras con abundante agua caliente. El resultado es sorprendente y podrás evitar los malos olores con este remedio casero natural.
Para tener un mayor efecto, recuerda repetir la operación de forma periódica usando vinagre y bicarbonato. Desde ahora no necesitarás productos químicos del mercado para dejar reluciente y con un buen olor el baño de tu hogar.
Sin dudas, el baño es una de las zonas de la casa que más problemas de cabeza da a la hora de limpiar; además, por salud, debes tener más vigiladas. Con esta solución, no solo mejorará a la vista de tus invitados, sino también cuidarás a tu familia de las bacterias.
Limpiar cocinas
El bicarbonato, además de eliminar olores, también sirve para limpiar otras zonas de la casa, como por ejemplo la cocina y todos sus electrodoméstico. También destacar que sirve para erradicar los gérmenes y las bacterias.
La cocina es otra de las partes que más trabajo nos cuenta dejar relucientes, pero para lograrlo debemos usar un barreño agua caliente, dos tapas de vinagre blanco, un chorrito de amoniaco y una cucharada bicarbonato.
Esparcimos la mezcla por todos los rincones y dejamos actuar varias horas, para luego retirar con abundante agua y jabón.