Una incapacidad permanente total puede derivar de accidente de trabajo, enfermedad profesional, accidente no laboral o enfermedad común. Se trata de un grado de incapacidad permanente que inhabilita al trabajador para desarrollar su profesión habitual, aunque la pensión es compatible con el desarrollo de otras actividades laborales que no entren en conflicto con las limitaciones que dieron origen a la incapacidad.
Además de percibir una pensión contributiva mensual, si la incapacidad permanente total deriva de accidente de trabajo, es posible conseguir una indemnización económica. Esto es algo que deben conocer los ciudadanos en España.
Indemnización por accidente de trabajo
Los profesionales de ‘Fidelitis’ explican que «en España, los accidentes de tráfico son una causa frecuente de lesiones graves que pueden resultar en incapacidades permanentes. Una de las consecuencias más devastadoras de estos accidentes es la Incapacidad Permanente Total (IPT), que impide a la persona afectada volver a realizar su trabajo habitual».
El reconocimiento de una incapacidad permanente total implica la percepción de una pensión con una cuantía equivalente al 55% de la base reguladora del trabajador. Puede llegar a ser equivalente al 75% de la base reguladora, en caso de que la persona beneficiaria esté en paro y tenga 55 años o más.
Así, un trabajador también puede conseguir una indemnización económica por incapacidad permanente causada por un accidente de trabajo. Para ello, es necesario completar los siguientes pasos, tal y como señalan desde ‘Fidelitis’:
- Atención médica inmediata: Es necesario documentar las lesiones oficialmente justo después de sufrir el accidente de tráfico.
- Informar a las autoridades y a las compañías de seguro: El informe policial es uno de los documentos fundamentales en el proceso de reclamación de la indemnización.
- Recopilación de documentos: El usuario afectado debe contar con los informes médicos, informes de rehabilitación, informe de la incapacidad permanente total e informes de testigos y policías.
- Evaluación de la incapacidad permanente: La evaluación del grado de incapacidad permanente debe ser desarrollada por un Tribunal Médico.
El último paso consiste en presentar la solicitud formal a la Seguridad Social. Puede tratarse de un proceso complejo y tedioso, por lo que es recomendable contar con el apoyo y asesoramiento de un abogado especialista en incapacidades laborales.
Cómo calcular la indemnización de incapacidad permanente total
Para calcular la cuantía de la indemnización por incapacidad permanente total a causa de un accidente de trabajo, es necesario tener en cuenta los siguientes factores, según informan desde ‘Fidelitis’:
- Ingreso base: Es decir, el salario que la persona recibía antes de que se produjese el accidente de trabajo.
- Edad de la persona afectada: Por norma general, cuanto más jóven es la víctima, mayor es la indemnización a percibir por la incapacidad permanente total. Es decir, se trata de una nueva situación que le afectará por un periodo más largo durante su vida.
- Grado de incapacidad: En este caso, hablamos de una incapacidad permanente total, aunque en determinados casos puede ser mayor.
- Circunstancias personales: La cuantía de la indemnización puede variar en función de las circunstancias personales de la persona beneficiaria.
- Gastos médicos y gastos de rehabilitación: Todos estos gastos deben ser considerados a la hora de determinar el importe de la indemnización económica.
Con todo ello, los expertos de ‘Fidelitis’ exponen un ejemplo para que todos los ciudadanos puedan observar mejor la cuantía que se puede llegar a cobrar por una indemnización de incapacidad permanente total por accidente de trabajo.
Supongamos un trabajador de 40 años que sufre un accidente de tráfico y le provoca una incapacidad permanente total. Además, establecemos que su salario previo al accidente era de 30.000 euros, con una estimación de 50.000 euros para gastos médicos y de rehabilitación. También tiene dos niños menores de edad a su cargo.
Como conclusión, los profesionales de ‘Fidelitis’ aseguran que «con estos datos, se puede estimar una indemnización considerando el ingreso perdido hasta la edad de jubilación, los gastos médicos y las circunstancias personales, resultando en una indemnización que podría oscilar entre los 400.000 y 500.000 euros«.