El sistema de la Seguridad Social establece una serie de requisitos básicos para que los ciudadanos tengan derecho a percibir una pensión contributiva de jubilación. Así, los requisitos más relevantes están relacionados con la cotización del trabajador durante su vida laboral y la edad de acceso a la jubilación.
Actualmente, en 2022, la edad ordinaria de jubilación en España es de 66 años y dos meses para aquellas personas que hayan cotizado menos de 37 años y seis meses a la Seguridad Social. Así, la edad ordinaria en 2022 también es de 65 años para aquellas personas con una cotización igual o superior a 37 años y seis meses durante la vida laboral.
Es necesario aclarar que en España existen diferentes modalidades de jubilación, que también tienen su influencia en la cuantía a percibir en la pensión. Por ejemplo, con la modalidad de jubilación demorada se puede incrementar el importe a recibir en la pensión.
Pensión de jubilación con 20 años cotizados
Muchas personas se preguntan si es posible cobrar una pensión contributiva de jubilación con menos de 20 años cotizados a la Seguridad Social. La respuesta es que sí, aunque como mínimo debe acreditar una cotización de 15 años durante la vida laboral. Además, dos de esos años deben estar comprendidos en los 15 inmediatamente anteriores a la jubilación.
Las personas con una cotización de 15 años a la Seguridad Social tienen derecho a percibir la cuantía mínima de la pensión contributiva de jubilación vigente en cada momento, equivalente al 50% de la base reguladora. A partir de los 15 años de cotización, por cada mes completo cotizado sube un porcentaje en la cuantía que corresponde percibir en la pensión.
Teniendo en cuenta la edad de jubilación actual y la normativa vigente, a una persona con 20 años de cotización le correspondería una pensión contributiva de jubilación con un porcentaje de la base reguladora del 62, 6%.
En definitiva, las personas con una cotización inferior a 20 años si pueden optar a una pensión contributiva de jubilación. Eso sí, dicha cotización debe ser siempre superior a 15 años durante la vida laboral. Así, las personas con una cotización inferior a 15 años no podrán acceder a este tipo de pensión.
Para las personas que no han cotizado un mínimo de 15 años a la Seguridad Social, el sistema habilita las pensiones no contributivas de jubilación. Estas pensiones están gestionadas por el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO).
Desde el IMSERSO explican que «el Estado garantiza a las personas comprendidas en su campo de aplicación, por realizar una actividad profesional o por cumplir los requisitos exigidos en la modalidad no contributiva, la protección adecuada frente a las contingencias y en las situaciones que se contemplan en la Ley General de la Seguridad Social».