Este 27 de septiembre se conmemora el Día Mundial del Turismo, un día para recordar la película ‘Hasta la vista’, donde un viaje a España de tres belgas, con el vino y el enoturismo como pretexto, y el desafío de perder la virginidad de un grupo formado por tres personas con distintos tipos de discapacidad son protagonistas.
Y es que hay películas donde la discapacidad es protagonista que están unidas a otro temática y se han convertido en populares, como es el caso de ‘Campeones’, donde se cuenta la historia de superación de un equipo de baloncesto, o ‘Vivir dos veces’, que primera historia de amor de una persona mayor que tiene Alzheimer.
Desde la Organización Mundial del Turismo (UNWTO) señalan que el Día Mundial del Turismo en este 2023 sirve como «una llamada a la acción para que la comunidad internacional, los gobiernos, las instituciones financieras multilaterales, los socios para el desarrollo y los inversores del sector privado se unan en torno a una nueva estrategia de inversión turística».
LA HISTORIA DE ‘HASTA LA VISTA’
La película de ‘Hasta la vista’, dirigida por Geofrrey Enthoven, fue estrenada en 2011 y se encasilla dentro del género de comedía y drama, aunque muchos la han catalogado como una road movie belga flamenca. El film está basado en la historia de Mariano Vanhoof a la experiencia de vida del americano Asta Philpot y sus amigos.
La película cuenta la historia de Lars (Gilles De Schryver), Philip (Robrecht Vanden Thoren) y Joseph (Tom Audenaert), que son tres jóvenes con discapacidad amante del vino y las mujeres. Cada uno de ellos tiene una discapacidad diferente. Lars es un enfermo terminal con un tumor cerebral que se desplaza en silla de ruedas; Joseph es casi completamente ciego; y Philip no puede caminar ni usar sus brazos por ser parapléjico y también va en silla de ruedas.
Estos jóvenes quieren perder la virginidad en España y para ello realizan este viaje sin sus padres, a los que le hablan de que el pretexto es hacer un viaje enológico, debido a que aman el vino. Claude se convierte en la compañera de este grupo durante el viaje, enamorándose mutuamente de Joseph y con un final dramático para este trío de personas con discapacidad.
Esta película que no es muy conocida, obtuvo varios premios, como la Espiga de Oro a la mejor película en el Festival de Valladolid – Seminci en 2011, el premio a mejor película del Festival de Montreal en 2011 o el premio del público a mejor película europea en los Premiso del Cine Europeo 2012.
En cuanto a las críticas en periódicos encontramos de todo. En El País se recoge que «su ejecución es correcta, su mecánica es de manual de guión y su buenismo se camufla bajo un espejismo de atrevimiento», como señala Jordi Costa.
Sin embargo, Sergi Sánchez en La Razón señala que la película es «previsible para la sensibilidad. La película es tan poco sutil en sus manipulaciones dramáticas que rechina a quien pida un poco de complejidad al tratamiento de un tema tan espinoso».
Opiniones diferentes, en una película donde la discapacidad es protagonista y parece que no deja a nadie indiferente.