Muchas de las personas que tienen discapacidad se preguntan lo mismo. ¿Qué debo hacer para cobrar una pensión? Pues eso va a depender del grado de discapacidad que tenga el sujeto con discapacidad. Es decir, no existen pensiones destinadas para personas con una discapacidad inferior al 65%, que se incluye dentro de la clase IV.
Además, dependiendo del grado de discapacidad que tenga el sujeto, cambiará la cantidad a percibir por la pensión de la Seguridad Social que vaya a recibir. Por ejemplo, si la discapacidad es del 75%, el importe a recibir será un 50% más que si el grado de discapacidad es del 66%. Lo explicamos más detenidamente en este artículo.
Diferentes grados de discapacidad
En primer lugar, vamos a hablar sobre los diferentes grados de discapacidad para posteriormente exponer a que ayudas se puede acoger cada grupo.
- Clase I (0% de discapacidad). La persona es calificada con incapacidad.
- Clase II (1% al 24% de discapacidad). La persona es calificada con discapacidad leve.
- Clase III (25% al 49% de discapacidad). La persona es calificada con una discapacidad moderada.
- Clase IV (50% al 70% de discapacidad). La persona es calificada con una discapacidad grave.
- Clase V (más del 70% de discapacidad). La persona es calificada con una discapacidad muy grave.
¿Con qué grado de discapacidad puedo cobrar una pensión?
Una vez que hemos conocido las cinco clases en las que se agrupa los diferentes grados de discapacidad, vamos a avanzar sobre como podemos acceder a cobrar una pensión. La clase I queda fuera de toda pensión por discapacidad, ya que son dolencias diagnosticadas pero que no generan discapacidad alguna.
En el caso de la clase II, ocurre lo mismo. Estas personas tienen una discapacidad leve, entre el 1% y el 24%, y no pueden obtener una pensión por ello. En el clase III, donde se incluye a las personas que tienen una discapacidad moderada (25% al 49%) tampoco tienen derecho una prestación económica por discapacidad.
Además, esta clase de personas con discapacidad cuenta con mayores beneficio sociales y fiscales que las personas que ostentan menos del 33%. Un ejemplo son las tarjetas de aparcamiento para personas con movilidad reducida (tarjetas PMR); en la declaración de la renta, a la hora de comprar un vehículo; de viajar en transporte público o el acceso privilegiado a viviendas de protección oficial.
Pensiones a partir del 65% de discapacidad
Es en la clase IV donde ya algunas personas pueden acceder a una pensión por discapacidad, ya que hay que tener más de un 65% de discapacidad para poder cobrar una pensión por ello. Esa ayuda, pensión no contributiva, sería de 5.178,60 euros al año, dividida en 14 pagas de 369,90 euros al mes (12 pagas mensuales y 2 extras).
Si el grado de discapacidad es del 75% o superior, la cifra aumentaría en un 50%, hasta los 7.767,90 euros anuales. En este caso estaríamos ante una cantidad fija que es diferente de las pensiones por incapacidad permanente, que van de menos a más según las dolencias de la persona.
Para calcular el importe exacto a percibir se tienen en cuenta las rentas personales propias y las de la familia con quien se convive. Aunque esta ayuda nunca será inferior a 1.294,65 € al año (92,48 € al mes).
Requisitos para cobrar una pensión por discapacidad
Para acceder a cobrar una pensión por discapacidad hay que cumplir cuatros requisitos. En primer lugar, tener reconocido un grado de discapacidad igual o superior al 65%. Además, el sujeto deberá de tener entre 18 años y 64 años en el momento de tu solicitud.
A lo citado anteriormente hay que sumarle que el ciudadano debe residir legalmente en España durante, al menos, cinco años en total, de los cuales dos de ellos han de ser los dos años anteriores a tu solicitud. Por último, el solicitante debe carecer de ingresos que superen, por otras vías, los 5.178.60€ anuales.
Cómo se calcula el grado de discapacidad
A la hora de calcular el grado de discapacidad de una persona, el equipo técnico tiene en cuenta los siguientes aspectos:
- Actividad física
- Actividades de cuidado personal
- Afectación del sueño
- Capacidad de comunicación
- Dinámicas sociales y de ocio
- Funcionalidad sexual
- Funcionamiento de los cinco sentidos y de las manos
- Utilización de los medios de transporte
Una vez realizada esta prueba, al sujeto se le asignará un determinado grado de discapacidad.