El sistema de pensiones en España sigue evolucionando para garantizar su sostenibilidad a largo plazo. A partir de 2025, entrarán en vigor importantes cambios en la edad de jubilación y los años de cotización necesarios para acceder a una pensión completa. Estas modificaciones buscan equilibrar el sistema y adaptarlo a una población que vive más años, lo que supone un mayor tiempo de percepción de las pensiones.
Para quienes están próximos a la edad de jubilación, conocer estos cambios resulta fundamental, ya que pueden influir directamente en la planificación financiera y en la cantidad de pensión que recibirán.
Principales cambios en la jubilación para 2025
1. Aumento progresivo de la edad legal de jubilación
- Desde el 1 de enero de 2025, la edad ordinaria de jubilación será de 66 años y 8 meses.
- Excepción: quienes hayan cotizado al menos 38 años y 3 meses podrán jubilarse con 65 años, accediendo al 100 % de la pensión sin reducciones.
2. Ajustes graduales hasta 2027
El incremento de la edad de jubilación será progresivo hasta 2027, cuando se establecerá definitivamente en 67 años para quienes no cumplan con los años de cotización requeridos.
- En 2026: La edad mínima de jubilación será de 66 años y 10 meses.
- En 2027: Se consolidará en 67 años, salvo para quienes acrediten al menos 38 años y 6 meses de cotización, que podrán jubilarse con 65 años.
3. Requisitos de cotización para acceder al 100 % de la pensión
- En 2025, se requieren 38 años y 3 meses cotizados para acceder a una pensión completa.
- En 2026, este requisito se mantiene, pero en 2027 aumentará a 38 años y 6 meses.
Esto significa que quienes no alcancen estos periodos de cotización podrán jubilarse más tarde o ver reducida su pensión con los coeficientes reductores aplicables.
4. Cambios en la jubilación anticipada
El sistema sigue permitiendo la jubilación anticipada, pero con condiciones más estrictas:
- Será posible retirarse con 63 años solo si se han cotizado al menos 38 años y 3 meses.
- En caso de no cumplir con estos requisitos, se aplicarán penalizaciones en la pensión, dependiendo de la modalidad de jubilación y el tiempo adelantado con respecto a la edad legal.
Impacto en la planificación financiera
Los nuevos requisitos demandan una planificación más rigurosa para evitar reducciones en la pensión. Algunos aspectos clave a considerar incluyen:
- Revisar el historial de cotización en la Seguridad Social para conocer la situación actual y anticipar posibles ajustes.
- Valorar la posibilidad de seguir trabajando algunos meses o años adicionales para alcanzar el umbral de cotización exigido y evitar penalizaciones.
- Considerar planes de ahorro privados, como planes de pensiones o inversiones complementarias, para garantizar una estabilidad económica mayor en la jubilación.
- Explorar la opción de jubilación parcial, que permite compatibilizar el cobro de la pensión con el mantenimiento de una actividad laboral reducida.
Recomendaciones para adaptarse a los cambios
La clave para mitigar el impacto de estas modificaciones es la anticipación. Conocer a fondo las nuevas reglas y ajustar la planificación financiera puede marcar la diferencia entre una jubilación estable y posibles recortes en la pensión.
Los trabajadores próximos a la edad de jubilación deben verificar sus cotizaciones, explorar opciones de ahorro y, si es necesario, ajustar su estrategia laboral para cumplir con los nuevos requisitos sin afectar su calidad de vida en el futuro.
La Seguridad Social ofrece herramientas digitales para consultar la vida laboral y realizar simulaciones sobre la futura pensión, lo que permite tomar decisiones informadas y estratégicas.