Dicen que «cuando existen las ganas, nada es imposible». Un claro ejemplo es el joven Gabriel Bernardes, que ha superado todas las adversidades para cumplir su sueño: ser un chef reconocido. Y lo está consiguiendo, puesto que es feliz haciendo lo que más le gusta, cocinar. Gabriel tiene síndrome de Down, pero para él eso es una de las tantas características que lo definen como persona.
A sus 26 años, desde pequeño siempre se ha sentido atraído por la cocina, especialmente por la repostería. De hecho, su amor por los postres fue lo que le motivó a preparase para ser un experto en esta disciplina.
El joven, con el apoyo de su familia, comenzó a realizar cursos para explotar sus habilidades. Tras adquirir su formación, Gabriel se convirtió en un especialista en los postres gourmet. Pero el no solo quería cocinar para el deleite de sus familiares y amigos, sino que quería ir más allá.
Conociendo el estigma que parte de la sociedad tiene sobre las personas con síndrome de Down, Gabriel Bernardes quiso cambiar eso y demostrar que vivir con esta condición no es un motivo de discriminación.
En 2017 creo su propia marca de dulces gourmet, conocido como Downlicia. Con este nombre hace alusión al trastorno que tiene y a la delicia de sus postres. Está enfocada principalmente a las trufas de distintos sabores.
Gracias a su dedicación y al apoyo de su familia, el talentoso chef ha alcanzado el éxito con sus creaciones culinarias y día con día le hacen múltiples pedidos, pues el sabor es exquisito e inigualable.
Un influencer en redes sociales
Actualmente vive en São Paulo, Brasil, y es conocido popularmente en redes sociales por Downlicia, nombre que recibe en redes sociales. Utiliza sus diferentes perfiles para darse a conocer como cocinero, mostrar sus recetas y productos.
El chef Gabriel Bernardes cuenta con más de 339.000 seguidores en Instagram y más de 395.000 en Facebook. Además, cuenta con su propio perfil en Youtube, donde sube recetas y tiene más de 20.000 suscriptores.
Sus videos están en su idioma natal, el portugués, pero tienen subtítulos en otras lenguas para que personas de múltiples países puedan comprenderlos.
El objetivo de de Gabriel Bernardes no sólo es crecer como chef, sino romper con los prejuicios que la sociedad tiene hacia los individuos que viven con síndrome de Down.