Las vicisitudes de la vida, llevan en ocasiones a algunos padres a no querer incluir a un hijo en el testamento. Y es que la familia, por muy de sangre que sea, no siempre cumple el papel que se espera de ella. Sin embargo, la ley protege a esta figura por si se da el caso, de que son los progenitores quienes no son justos con los hijos. Pues es cierto que hay hijos que no se merecen nada de sus padres, pero también padres que no están a la altura con sus hijos.
Es por ello, que a pesar de hacer testamento, una persona no tiene la libertad para dejar toda su herencia a quien quiera. El Código Civil establece, que una parte de la masa hereditaria, debe ser obligatoriamente para los herederos forzosos. Concretamente, la legítima a partes iguales, y el tercio de mejora en la proporción que el testador indique. Pero, ¿Quiénes son los herederos forzosos? La ley indica que son los siguientes:
- En primer lugar, los hijos y descendientes respecto de sus padres y ascendientes.
- A falta de los anteriores, los padres y ascendientes respecto de sus hijos y
descendientes. - En ausencia de los anteriores, el viudo o viuda.
No incluir a un hijo en el testamento ¿Qué dice la ley?
No incluir a un hijo en el testamento significa desheredarlo. Esta figura está incluida en la ley, sin embargo, no es tan fácil de aplicar. Es decir, deben cumplirse unos requisitos marcados legalmente, para que un progenitor pueda desheredar a su hijo. No obstante, los expertos aconsejan meditar bien esta decisión antes de tomar las medidas para llevarlo a cabo.
Pero, ¿Qué premisas deben cumplirse para desheredar a un hijo? Según la legislación española, son estas tres:
- Hay que hacerlo mediante un testamento otorgado ante notario.
- Solo puede ser por una de las causas establecidas en los artículos 852 a 855 del Código Civil. Estas causas son ‘númerus clausus’, es decir, son causas tasadas. No se puede desheredar por una causa distinta a las establecidas en dichos artículos.
- La causa de desheredación debe ser cierta.
Por tanto, el testamento es la herramienta fundamental para llevar a cabo este proceso. Cabe recordar, que de no existir este documento, la herencia se repartirán entre los herederos forzosos de la forma en la que marca el Código Civil. Esto significa, que no es un acto obligatorio, pero que si una persona quiere dejar establecido un fin como el de desheredar a un hijo, no tendrá más remedio que llevarlo a cabo.
Motivos legales para desheredar a un hijo
El Código Civil establece los motivos a los que puede recurrir una persona para no incluir a un hijo en su testamento. En este sentido, la normativa distingue dos grupos: Las causas genéricas y las específicas. En cuanto al primer grupo, se contemplan en el artículo 852 del Código Civil y son aplicables tanto a los hijos, como al resto de legitimarios:
- La existencia de una condena por sentencia firme por haber atentado contra la vida, o a pena grave por haber causado lesiones o por haber ejercido habitualmente violencia física o psíquica en el ámbito familiar al testador, su cónyuge, persona a la que esté unida por análoga relación de afectividad o alguno de sus descendientes o ascendientes.
- Acusar al testador de delito para el que la ley señala pena grave, si el desheredado es finalmente condenado por denuncia falsa.
- Obligar al testador a hacer testamento o a cambiarlo mediante el uso de amenazas, fraude o violencia.
- Impidiere a otro hacer testamento, o revocar el que tuviese hecho, o suplantare, ocultare o alterare otro posterior mediante el uso de amenazas, fraude o violencia.
Por parte del segundo grupo, las causas específicas son dos y vienen recogidas en el artículo 853 del Código Civil. En primer lugar, haber negado, sin motivo legítimo, los alimentos al padre o ascendiente que le deshereda. Y segundo, haberle maltratado de obra o injuriado gravemente de palabra.
Es importante puntualizar además, las inclusiones que la doctrina y jurisprudencia han introducido en este sentido. Y es que gracias a esta, el maltrato psicológico es una causa justa de desheredación. Por tanto, un progenitor puede desheredar a un hijo si acredita haber sido maltratado psicológicamente por este.