Las personas con movilidad reducida tienen preferencia en sus cajas adaptadas según la Ley 4/2017, de 25 de septiembre, de los Derechos y la Atención a las Personas con Discapacidad en Andalucía en su artículo 54 las personas con discapacidad tienen preferencia en el uso de alojamientos y espacios.
Como recoge una publicación en la red social de Facebook, la socia de ASPAYM Cádiz y de nombre Esther, con un 84% de discapacidad provocado por un ictus y con movilidad reducida, ha vivido una desagradable experiencia en el centro comercial, ya que la empleada se había saltado algo tan coherente y de sentido común, como es favorecer la movilidad y atención a las personas con discapacidad.
Según Esther, la cajera de Hipercor se había dirigido haciendo referencia a que esperara a su turno, de lo contrario, que se quedara en el coche. Una frase que había dañado y violado sus derechos.
Desde la entidad reclaman que las personas con discapacidad tienen unos derechos reconocidos para lograr integrarse en igualdad de condiciones a la sociedad, ya que tener preferencia en la cola de un supermercado no es un lujo, sino una necesidad de estas personas por su problema de movilidad.