La Seguridad Social cuenta con las pensiones de incapacidad permanente para las personas que tienen una enfermedad o discapacidad, como es el caso de las personas que tienen ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica), que es una enfermedad que afecta a las neuronas y que es degenerativa, es decir, que cuanto más tiempo pase, peor son sus consecuencias.
Debemos de tener en cuenta que la ELA es una enfermedad neurodegenerativa incurable que afecta a las neuronas motoras del cerebro y de la médula espinal. Esta patología provoca la atrofia muscular hasta dejar al paciente totalmente inmóvil, sin poder realizar tareas básicas como comer, hablar o respirar, pero con las facultades mentales y cognitivas intactas.
La pensión que puedes recibir si tienes ELA
Debemos de tener en cuenta que la ELA es una enfermedad altamente incapacitante que, debido a su naturaleza progresiva, puede afectar de manera grave la capacidad laboral, hasta tal punto que el paciente dejará de trabajar en algún punto de la enfermedad.
Dependiendo del grado de avance, existen diferentes tipos de incapacidad laboral que pueden ser solicitados, diferenciando entre varias prestaciones.
Incapacidad parcial
Desde la Seguridad Social señalan que la incapacidad parcial por ELA implica una reducción del 33% de la capacidad para desempeñar el trabajo habitual. Esto quiere decir que la persona puede continuar trabajando, aunque la enfermedad le impide rendir de manera óptima, afectando de esta manera a su desempleo.
Incapacidad permanente total
Cuando hablamos de una incapacidad permanente total debemos de tener en cuenta que la ELA hace imposible realizar el trabajo habitual del afectado, pero le da la posibilidad de desarrollar otro empleo adaptado a sus nuevas capacidades. En este sentido, el avance de la enfermedad limita la actividad física, especialmente en trabajos que requieren esfuerzo motor.
Incapacidad permanente total calificada
La Seguridad Social recuerda que las personas mayores de 55 años, cuando la reinserción laboral es especialmente difícil, la incapacidad permanente total calificada implica un incremento del 20% en la base reguladora de la pensión, considerando la dificultad de obtener un nuevo empleo debido a la enfermedad.
Incapacidad permanente absoluta
Una persona con ELA puede recibir la incapacidad permanente absoluta cuando la enfermedad le impide realizar cualquier tipo de empleo. En este caso, la pérdida de movilidad, fuerza muscular y autonomía en las actividades básicas hace imposible el desempeño laboral de cualquier naturaleza.
Gran Invalidez
En los casos más avanzados de ELA las personas necesitan asistencias constante de terceros para realizar actividades cotidianas, como alimentarse, vestirse o moverse. En este caso, la persona obtiene la pensión de Gran Invalidez.
Requisitos para solicitar la incapacidad permanente por ELA
Si atendemos a los requisitos que exige la Seguridad Social para poder acceder a la incapacidad permanente por ELA encontramos varios elementos a tener en cuenta, como es el diagnóstico médico, ya que es fundamental presentar un informe médico detallado que documente la ELA, con historial clínico, síntomas y pruebas como electromiografías o resonancias magnéticas que confirmen la degeneración neuromuscular característica de la enfermedad.
A esto hay que sumarle una cotización mínima, ya qu e si no has cotizado no podrás acceder a esta prestación, en este caso deberás acudir a la pensión no contributiva de invalidez del IMSERSO.
Finalmente, la persona interesada deberá de presentar una documentación necesaria, en la que se requiere un certificado médico que detalle la progresión de la ELA, las limitaciones funcionales y la imposibilidad de trabajar. Los informes de especialistas en neurología deben respaldar el impacto de la enfermedad en la capacidad laboral del solicitante.