Las amas de casa -o trabajadoras del hogar- desarrollan una importante labor para el cuidado de la casa y tareas domesticas que, en muchas ocasiones, no tiene el reconocimiento que debería. De hecho, hasta hace escaso tiempo, estas mujeres apenas podían cotizar a la Seguridad Social, por lo que la jubilación que les correspondía derivaba de unas cuantías muy bajas. No obstante, las instituciones trabajan para que tengan derecho a una prestación una vez que cumplan la edad ordinaria para la retirada de la actividad laboral.
De la misma manera, las amas de casa, según ha confirmado el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones podrán disfrutar de una «importante» ventaja fiscal de cara a la declaración de la renta, que dará comienzo el día 2 de abril y finalizará el próximo 30 de junio. En este sentido, la Agencia Tributaria ya ha anunciado que las trabajadoras del hogar podrán optar a un beneficio para reducir una parte de su carga fiscal.
Beneficios fiscales de las amas de casa
Ya sea por motivos sociales, económicos o, simplemente, voluntarios, muchas personas han decidido dedicarse a las tareas del hogar, dejando su profesión o, directamente, no llegando a ejercer. Por tanto, esta compleja realidad también ha concluido en que estos colectivos no hayan cotizado nunca, por lo que la contribución a la Seguridad Social es prácticamente inexistente. Por ello, Hacienda ofrece una serie de ventajas para reducir su carga fiscal en la declaración de la Renta familiar, además de acceder a ciertas ayudas económicas.
De este modo, las amas de casa pueden presentar la declaración conjunta. Esto es, la Agencia Tributaria permite que, si la persona que trabaja como ama de casa no tiene ingresos, puede presentar la renta junto con su cónyuge trabajador. Esto supone una reducción de la base imponible del núcleo familiar. Igualmente, las amas de casa tienen acceso a deducciones por cuidado de hijos o ascendientes, lo que significa que, si cuidan de hijos menores de 3 años, pueden solicitar la deducción por maternidad de 1.200 euros anuales.
Además, si la pareja tiene hijos, pueden beneficiarse de deducciones adicionales por descendientes. De hecho, si la familia tiene tres o más hijos, tiene derecho a una deducción de hasta 1.200 euros anuales en la declaración de la Renta. Para familias numerosas de categoría especial, esta deducción asciende a los 2.400 euros anuales.
Subvenciones y ayudas para amas de casa
De acuerdo con la normativa autonómica y municipal, estas personas también tienen derecho a acceder a subvenciones y ayudas específicas para mujeres que no trabajan fuera del hogar, así como programas de formación y acceso al empleo para amas de casa que deseen reincorporarse al mercado laboral. Sin embargo, además de estas ventajas fiscales, las personas dedicadas al cuidado de la vivienda también reciben determinadas prestaciones de la Seguridad Social.
Así, el Ingreso Mínimo Vital es una de estas ayudas. Este subsidio está dirigido a prevenir el riesgo de pobreza y exclusión social de las personas que viven solas o en familia pero carecen de los recursos económicos básicos para sus necesidades. Por tanto, las amas de casa que carezcan de ingresos propios y su familia se encuentre en situación de vulnerabilidad, es posible que sean beneficiarias para recibir el IMV.
Finalmente, las amas de casa en edad de jubilación y que no hayan cotizado el período de 15 años exigido por la Seguridad Social, también tienen derecho a otra prestación conocida como pensión no contributiva. Esta pensión está destinada a personas residentes en España y con pocos ingresos. El importe para este 2025 es de 564,7 euros al mes distribuidos en 14 pagas.