El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha cerrado un acuerdo con los sindicatos para aumentar la pensión mínima en España a 1.200 euros. Todo ello, contando con la aprobación de Unidas Podemos.
Esta medida que afecta a las pensiones se incluye en la segunda pata de la reforma de pensiones, que pasará próximamente por el Consejo de Ministros. Si bien, la subida de la prestación mínima contributiva en España se llevará a cabo de manera progresiva en los próximos cuatro años.
La segunda pata de la reforma, a punto
Es cuestión de horas que el Consejo de Ministros apruebe la segunda pata de la reforma de pensiones. Una segunda pata que se ha encallado durante meses tras no llegar a un entendimiento entre el Gobierno de España, las patronales, CEOE y los sindicatos.
Según fuentes gubernamentales, la segunda pata de la reforma de pensiones podría aprobarse este jueves 16 de marzo de 2023 en un Consejo de Ministros extraordinario, previa aprobación por parte de los partidos políticos en la Comisión del Pacto Toledo. Entre otras medidas de interés, se ha acordado un aumento de la pensión mínima a 1.200 euros en un periodo de cuatro años.
El objetivo de la Seguridad Social es llevar a la prestación mínima de jubilación a la misma cuantía del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), con 1.200 euros al mes en doce pagas. Es decir, 15.120 euros brutos anuales.
La segunda pata de la reforma de pensiones también incluye mejoras para reducir la brecha de género existente en las pensiones o el aumento del periodo de cálculo para la pensión contributiva de jubilación. En definitiva, medidas de relevancia para los actuales pensionistas y las generaciones futuras.
Aumento progresivo de la pensión mínima
La pensión mínima no se situará de golpe en 1.200 euros, sino que se ha acordado un aumento transitorio de la cuantía a percibir por este tipo de pensión. Concretamente, se marca un periodo progresivo en cuatro años hasta que la pensión mínima se establezca en 1.200 euros al mes.
La finalidad de esta medida negociada con los sindicatos y aceptada por Unidas Podemos es equiparar la cuantía de la pensión mínima al Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de los trabajadores. Para marcar el camino de aumento progresivo de la pensión mínima, desde el Gobierno de España se tendrá en cuenta el umbral de pobreza para los hogares.
En la actualidad, la cuantía de la pensión mínima de jubilación varía en función de la situación conyugal de la persona beneficiaria. De esta forma, la pensión mínima para mayores de 65 años de edad es de 966,20 euros al mes con cónyuge a cargo; 783,10 euros sin cónyuge; y 743,40 euros con cónyuge no a cargo. Así, la nueva normativa que se incluye en la reforma supondrá un beneficio para todos los ciudadanos que cobran la pensión mínima.
Con todo ello, la Seguridad Social traza una acción de trabajo para reducir la brecha existente hasta situar la prestación mínima en 1.200 euros en 2027. Para ello, en 2024 se debe reducir la brecha un 20%; un 30% en 2025; y un 50% en 2026. Finalmente, el Gobierno de España tendrá que activar los mecanismos que procedan para asimilar la situación y cumplir con la normativa incluida en la segunda pata de la reforma del sistema.