Persona con discapacidad en su puesto de trabajo

Empleo: ¿Se debe informar a la empresa contratante de la discapacidad?

Las personas con discapacidad se encuentran con multitud de barreras para acceder al mercado laboral. Por ello el Gobierno pone a disposición de las empresas ayudas, subvenciones e incentivos para primar la contratación de personas con discapacidad. Y es que el empleo es una buena herramienta para lograr la inclusión de este colectivo en la sociedad.

Además, debemos de recordar que por ley aquellas empresas públicas y privadas que emplean a 50 o más trabajadores (cómputo total de empleados) están obligadas a que, al menos, el 2% de éstos tengan el certificado de discapacidad (porcentaje de discapacidad igual o superior al 33%).

De hecho, en el artículo 49 de la Constitución se habla sobre las personas con discapacidad. Un artículo que está en bocas de todos por utilizar la palabra ‘disminuido‘ para referirse a este colectivo y que todavía no se ha cambiado por diferencias entre los partidos políticos. Dicho artículo recoge que «los poderes públicos realizarán una política de previsión, tratamiento, rehabilitación e integración de las personas con discapacidad física, sensoriales y psíquicos, a los que prestarán la atención especializada que requieran y los ampararán especialmente para el disfrute de los derechos que la Constitución otorga a todos los ciudadanos».

A continuación vamos a explicar si una persona debe de señalar que tiene discapacidad a la hora de ser contratado por una empresa, ya que es algo que muchas personas con discapacidad se preguntan.

¿Hay que informar a la empresa que me va a contratar que tengo una discapacidad?

Desde Fundación ONCE señalan que, en principio, nadie está obligado a declarar sobre su estado de salud a la hora de buscar empleo. Eso sí, destacan que el empresario tiene la obligación de adecuar el puesto de trabajo a la persona que contrata, tal y como se recoge en el artículo 15 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. De tal manera que el puesto deberá de estar adaptado circunstancias físicas y personales de cada trabajador.

Por lo tanto, si el trabajador tiene una discapacidad, el empresario debe adaptar su puesto de trabajo a sus circunstancias personales. Si no lo hace, podría incurrir en responsabilidad.

En este sentido, si el empresario no conoce la discapacidad que tiene el trabajador, se le podría causar un perjuicio que podría suponer como represalia la extinción de su contrato de trabajo, por trasgresión de la buena fe contractual, al no haber comunicado a la empresa el dato de la discapacidad.

El SEPE señala cuales son los puestos de trabajo más demandados para las personas con discapacidad | PEXELS
Personas con discapacidad en su puesto de trabajo | PEXELS

Además, se puede dar el caso de que una empresa que pudiese contratar al solicitante, se abstuviese de hacerlo, dada su condición de persona con discapacidad.

A todo lo dicho, hay que sumarle que existen ayudas o subvenciones a la contratación laboral de personas con discapacidad. De esta manera, hay empresas que buscan a trabajadores con discapacidad para tener mayor competitividad integrando la diversidad humana su plantilla y/o poder beneficiarse de dichas ayudas.

Por lo tanto, la decisión es personal, ya que no existe una obligación legal para que el trabajador comunique al empresario la existencia de una discapacidad.

Salir de la versión móvil