El Gobierno reactivará, cuando decaiga el Estado de Alarma, previsiblemente el próximo 9 de mayo, la reforma del artículo 49 de la Constitución Española. Todo ello con el objetivo de sustituir el término «disminuido» por el de «personas con discapacidad».
«Quiero anunciar que, una vez decaiga el Estado de Alarma, cuando constitucionalmente será viable proceder con trámites de reforma constitucional, queremos reactivar la reforma del artículo 49 de la Constitución Española para que algo que lleva demasiado tiempo detenido prosiga con rapidez», ha explicado el secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, durante un taller virtual organizado por CERMI.
Nacho Álvarez espera poder «avanzar con la celeridad que este trámite constitucional requiere». Además, ha recordado que «hay un amplísimo consenso en todos los niveles, administrativo y de todas las fuerzas políticas en el Congreso».
Se trata de una iniciativa que se llegó a acordar en el Congreso en 2018, pero su tramitación se vio paralizada por la convocatoria de elecciones de Pedro Sánchez en abril de 2019.
Esta iniciativa ya contó con el apoyo generalizado de la Comisión de Políticas para la Discapacidad de la Cámara baja. A este órgano encargó Carmen Calvo, en octubre de 2018, un texto alternativo al artículo 49 de la Carta Magna, en respuesta a la petición realizada por el Comité Estatal de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI).
‘Personas con discapacidad’ por ‘disminuido’
El objetivo de la comisión era, además de cambiar el término ‘disminuido’ por ‘personas con discapacidad’, incluir en el artículo 49 otros puntos que incidieran en los derechos de este colectivo.
Actualmente, dicho artículo establece que «los poderes públicos realizarán una política de previsión, tratamiento, rehabilitación e integración de los disminuidos físicos, sensoriales y psíquicos».
El nuevo texto propuesto dice que «las personas con discapacidad son titulares de los derechos y deberes previstos en este título en condiciones de igualdad real y efectiva, sin que pueda producirse discriminación», y encomienda a los poderes públicos la tarea de «realizar las políticas necesarias para garantizar una vida participativa, autónoma e independiente a las personas con discapacidad».
Esta redacción fue aprobada por el Consejo de Ministros, en el mes de diciembre de 2018, un anteproyecto de reforma que debía ser convalidado por el Congreso.
Accesibilidad Universal
Por otro lado, Nacho Álvarez ha destacado que la ley de protección a la infancia frente a la violencia, recientemente aprobada en el Congreso de los Diputados, y que continúa su tramitación en el Senado, «pone el acento» en la situación de vulnerabilidad de los niños y niñas, también especialmente de aquellos con discapacidad, y ha subrayado que la ley, que espera que se apruebe definitivamente «con la mayor rapidez posible», garantizará la «accesibilidad universal» de la infancia.
En este sentido, ha puesto en valor los fondos europeos, que permitirán una inversión de 3.500 millones de euros a derechos sociales para los próximos tres años, y quieren que parte de esta inversión esté vinculada a proyectos circunscritos al ámbito de la accesibilidad universal. Precisamente, ha dicho que una buena parte de los proyectos que les están llegando de las comunidades autónomas van en esta línea.
Además, durante el taller organizado por el CERMI este jueves bajo el título ‘La política territorial en línea con la convención internacional sobre los derechos de las personas con discapacidad’, también ha intervenido el delegado del CERMI para los Derechos Humanos y la Convención de la ONU, Jesús Martín, que además será el nuevo director general de Discapacidad del Gobierno.
Que desaparezcan los internamientos forzosos
Martín ha anunciado que, tras abolir la esterilización forzosa, de haber conseguido el voto de las personas con discapacidad intelectual y de haber luchado por dar voz a las personas con discapacidad en el tráfico jurídico, ahora se van a empeñar en trabajar para «que desaparezca del ordenamiento jurídico la práctica de los internamientos forzosos».
«Estamos haciendo un trabajo intenso, no es sencillo jurídicamente, vamos a poner el foco en medidas alternativas que respeten la voluntad de las personas y den garantías a las familias y a las propias personas. Estamos realizando un trabajo de investigación con grandes expertos y esperamos poder presentarlo pronto en la agenda política», ha explicado.
Sobre la convención internacional sobre los derechos de las personas con discapacidad, Martín ha indicado que es «un gran acontecimiento mundial» porque «empodera» a las personas con discapacidad tras mucho tiempo en el que se las ha visto como «sujetos pasivos» y en el que «el diagnóstico colonizaba» su vida.
«Durante mucho tiempo éramos solo ciegos, sordos, parapléjicos y otras palabras que hacen daño solo con verbalizarlas», ha precisado Martín, al tiempo que ha deseado que «la discriminación deje de ser el paisaje por el que transitan las personas con discapacidad».
Más mujeres que hombres con discapacidad
Por su parte, la vicepresidenta del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer de Naciones Unidas y vicepresidenta ejecutiva de la Fundación CERMI Mujeres, Ana Peláez, ha llamado a garantizar la participación directa de las mujeres y niñas con discapacidad pues «todavía hay muchas CCAA que cuentan con consejos de participación de la mujer u observatorios de violencia donde no hay representación del movimiento cívico de la discapacidad».
Según ha recordado, en España, el 60% de las personas con discapacidad son mujeres. En este sentido, ha enumerado algunos factores que contribuyen a que exista una mayor prevalencia de la discapacidad entre las mujeres frente a los hombres. Como «el menor estatus socioeconómico y social de la mujer; la violencia de género; y las prácticas nocivas discriminatorias por motivo de género», que pueden terminar ocasionando discapacidad.