Limpiar el hogar es maravilloso, pero cuando se ha finalizado. El proceso en sí puede resultar aburrido e incluso complejo en algunas ocasiones por la dificultad de eliminar algunas manchas, restos de cal o esperar a que se seque el suelo para poder volver a pisarlo. Además de ser costoso por los precios de los productos que, normalmente, se usan para el cuidado de la casa.
Además, también se da el caso de muchas familias con hijos pequeños que, por motivos laborales, no pueden hacerse cargo de las tareas de limpieza doméstica, por lo que han de delegar en una persona que cumpla con estas actividades. De este modo, por tanto, mantener la casa limpia es, todavía, más costoso por la contratación de una tercero persona.
Bien es cierto que es un gustazo oler a limpio los pasillos de la casa, la opacidad de las mamparas del baño o ver relucientes los cristales de las ventanas. Por ello, para evitar que la limpieza del hogar suponga un gasto extraordinario para las familias, la solución está más cerca de lo que nos podríamos creer. Existe un producto casero, muy fácil de conseguir, que ayuda a limpiar la casa de forma rápida y eficaz.
Para cristales y contra la cal
Pensar en productos caseros para la limpieza es, inmediatamente, acordarse de bicarbonato y vinagre, ingredientes por excelencia para mantener limpia, prácticamente, cualquier superficie. Sin embargo, en esta ocasión, no son los protagonistas. El secreto para mantener un hogar reluciente y bajo coste es el ácido cítrico, que se halla presente en frutas como el limón.
Se trata de un producto natural y que no deja ningún rastro de olor en las superficies sobre las que se aplica. De este modo, el ácido cítrico se puede encontrar tanto en polvo como en gránulos y, para darle uso, solamente es necesario disolverlo en agua templada. Una vez que está disuelto, ya se puede empezar a usar mediante una bayeta o un paño.
Este producto resulta muy eficaz para lavar la cal de los azulejos y la mampara del baño, logrando eliminar las manchas muy fácilmente y sin apenas esfuerzo. No obstante, otro modo de aplicación también puede ser a través de un bote con spray o difusor, de tal modo que se pueda aplicar directamente sobre la superficie en cuestión. Así, tras el paso de unos minutos, se dejar actuar el ácido cítrico para, finalmente, retirar toda la suciedad y los restos de producto con papel de cocina o un paño ligeramente húmedo.
Efecto blanqueador
Este producto casero, además de ocuparse de eliminar las gotas de cal más rebelde puede e incrustada en las esquinas de la casa, cuenta con la cualidad de tener un efecto blanqueador perfecto para las superficies que se hayan amarilleado por el uso y el paso del tiempo.
Al mismo tiempo, tiene la ventaja fundamental de evitar dejar ningún tipo de olor fuerte por los pasillos del hogar, así como es capaz de eliminar los malos olores, como, por ejemplo, desagradable olor de la humedad. Finalmente, es importante destacar que el ácido cítrico se puede mezclar con bicarbonato para aumentar la eficacia blanqueadora sobre las superficies de la casa.