Este pasado martes 18 de octubre se presentó en el Senado el informe titulado ‘El Estado de la Pobreza en España’, elaborado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN), en el que se refleja una realidad muy alarmante existente en nuestro país: en el año 2018, el 31,5% de las personas con discapacidad está en riesgo de pobreza o exclusión social.
Unas cifras que son, cuanto menos, preocupantes. Y este informe también refleja, una vez más, como el colectivo de personas con discapacidad es más vulnerable ya que su porcentaje es un 28% más elevado que el dato de las personas sin discapacidad.
Además, este informe refleja como pobreza y discapacidad están ligadas dada la mayor dificultad para el acceso al mercado laboral de estas personas y debido al sobrecoste agregado que significa tener una discapacidad.
Aunque lo más preocupante de todo esto es que, según la Organización Médica Colegial de España, la tasa de personas con discapacidad en riesgo de pobreza se ha mantenido desde el año 2008 en una media del 30,5%, con una variación máxima de un punto porcentual hacia arriba o hacia abajo.