Para las personas con diabetes, el hecho de tener los niveles de glucemia bajo control es una tarea fundamental en su día a día. En este sentido, el ejercicio físico y la alimentación son los dos aspectos claves para lograr esta estabilidad en la salud del organismo.
En concreto, la diabetes mellitus tipo 1 produce que las personas no tengan la capacidad suficiente para fabricar insulina suficiente a través del páncreas. Debemos tener en cuenta que la insulina es la hormona fundamental para la absorción de glucosa por parte del organismo.
Por este motivo, las personas con diabetes tipo 1 tienen la necesidad constante de medir sus niveles de glucemia en sangre para prevenir diferentes problemas de salud de mayor índole. Aquí no solo entra en juego los hábitos alimenticios de las personas con diabetes, sino también el deporte, pues el ejercicio físico es uno de los factores claves que pueden influir en los picos de glucosa en sangre.
Así influye el ejercicio físico en los niveles de glucosa
Todos los días, las personas con diabetes tipo 1 deben medir sus niveles de glucemia. Por lo general, esta forma de control se lleva a cabo después de las comidas para conocer como reacciona el cuerpo ante determinados alimentos. En este sentido, debemos tener en cuenta que las personas con diabetes no tienen prohibido comer ningún alimento en concreto.
Eso sí, es conveniente que limiten la ingesta de ciertos tipos de alimentos, como por ejemplo los ricos en hidratos de carbono que suponen un aumento considerable de los niveles de glucemia.
Ante la importancia de la alimentación, tampoco debemos olvidar la labor del ejercicio físico, pues constituye un hábito altamente beneficioso para las personas con diabetes, tanto tipo 1 como tipo 2. Además, tal es positiva la práctica del ejercicio físico, que puede prevenir la diabetes durante la adolescencia.
Sin embargo, el hecho de someternos a largas sesiones de ejercicio físico puede llegar a provocar en algunas personas episodios de hipoglucemia (descenso de los niveles de glucemia). Por ello, lo ideal es consultarlo con un especialista antes de iniciar una rutina de ejercicio y que pueda afectar de forma contraproducente nuestra salud.
Cómo controlar la glucemia antes del ejercicio físico
Para lograr evitar problemas del tipo de la hipoglucemia al realizar la actividad física, es conveniente que las personas con diabetes realicen un control de sus niveles de glucemia antes, durante y después del ejercicio físico. De esta manera, es importante tener en cuenta diferentes franjas de valores glucémicos:
- Niveles de glucemia inferiores a 100 mg/dL: Estos niveles están considerados como bajos. Es aconsejable incorporar un pequeño suplemento de hidratos de carbono de 5 a 10g antes de iniciar la actividad física. En cualquier caso no es recomendable que las personas con diabetes realicen actividad física con niveles de glucosa en sangre por debajo de 90 mg/dL.
- Niveles óptimos de glucemia entre 100 y 250 mg/dL: Si bien, hay que tener en cuenta que se puede dar una importante elevación de glucosa si la intensidad del ejercicio es alta y se realiza en periodos cortos de tiempo
- Niveles de glucemia por encima de 250 mg/dL (hiperglucemia): En este caso, es recomendable dejar la práctica deportiva para otro momento en el que los valores de glucosa en sangre se sitúen en niveles normales.