Los probióticos se han convertido en un sinónimo de bienestar digestivo. Numerosos estudios han demostrado la labor de estas bacterias a la hora de mantener una buena salud digestiva. A través de yogures o mediante suplementos probióticos, estas micro bacterias pueden jugar un importante papel en la salud de aquellos que la toman.
Las investigaciones van encaminadas a demostrar que los beneficios de los probióticos pueden encaminarse más allá de los procesos digestivos y actuar sobre la piel. De hecho, la piel que suele tener acné o rosácea ha mostrado una mejoría con el uso diario de probióticos, lo que nos hace ver las importantes razones de incluir los probióticos para acabar con el acné.
La gran mayoría de las células bacterianas que viven en el interior del cuerpo son inofensivas y los estudios muestran que, de hecho, pueden llegar a ser muy beneficiosas para el correcto funcionamiento del cuerpo humano. Así, se está investigando cómo actúan estas bacterias aplicándolas en la piel o tomados por vía oral para llegar a la dermis.
Los fabricantes de cosmeceútica han comenzado a usar los probióticos en sus productos basados en investigaciones recientes. Entre otros, están fabricando mascarillas probióticas, cremas y productos para higiene de la piel.
Así actúan los probióticos en la piel
En pacientes con acné y rosácea, los microorganismos que viven en la piel son reconocidos como extraños por el sistema inmunológico. Este entra en acción para hacer frente a esta amenaza, lo que desencadena las inflamaciones, enrojecimiento y papulas habituales en pieles acneicas.
Por otra parte, los probióticos aplicados tópicamente sobre la piel también previenen a las células de la piel de las bacterias y otro tipo de parásitos que causan esta reacción en el sistema inmunológico, según afirma la Dra. Carmen Galera, licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Salamanca.
De hecho, las propiedades antimicrobianas de los probióticos permiten atacar a las bacterias malas de la piel y las mata. Este mecanismo es muy parecido a la forma en la que los antibióticos trabajan en el tratamiento del acné y la rosácea.
En este sentido, los investigadores se encuentran probando con los probióticos para determinar cuales de dichas sustancias matan a las bacterias malas. La predicción es que las cepas puedan ser identificadas en un futuro muy próximo y que a continuación se puedan comercializar dichos productos por sus propiedades antimicrobianas.
Propiedades de los probióticos en el acné
Las personas con problemas de acné o rosácea puede experimentar brotes como resultado de este cambio en las bacterias del intestino y la inflamación posterior. Para contrarrestar los brotes de acné o rosácea asociadas con el eje intestino – cerebro – piel, se recomienda intentar controlar el estrés, dieta rica en fibra o consumir bacterias saludables para el intestino en forma de probióticos.
Los probióticos generar una barrera de sellado en el intestino que previene la inflamación que puede desencadenar el acné. Por ello, algunos estudios internacionales han mostrado una relación entre el uso del probiótico oral y la mejora del acné.
Recientemente, un estudio coreano llevado a cabo sobre 56 pacientes con acné, encontró que beber una dosis de Lactobacillus fermentada redujo efectivamente el número total de lesiones de acné. Por su parte, un estudio italiano añadió un probiótico oral a la mitad de los pacientes, mientras que la otra mitad no recibía el suplemento probiótico. Pues bien, el grupo con probiótico experimento una gran mejora en los síntomas de acné y rosácea.