El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) deniega la mayoría de solicitudes de incapacidad permanente en primera instancia. En ocasiones, los motivos por los que se deniega la solicitud son realmente sorprendentes.
Uno de los pasos más importantes a la hora de solicitar una pensión de incapacidad permanente en España consiste en superar el Tribunal Médico de la Seguridad Social. Los representantes del Tribunal Médico suelen ser muy exigentes.
Denegada la incapacidad permanente por las respuestas del acompañante
Por lo general, el Tribunal Médico realiza una serie de preguntas a la persona solicitante para determinar si se tiene derecho o no a cobrar la pensión de incapacidad permanente. En ocasiones, también pueden realizar algunas preguntas trampas.
Los representantes del Tribunal Médico también pueden pedir que el solicitante haga algún tipo de movimiento físico. Además, es fundamental que el paciente entregue la mayor cantidad de documentos médicos que demuestren sus limitaciones para la actividad laboral.
Cuando una persona solicita una incapacidad permanente por Gran Invalidez, es necesario que acuda acompañada al Tribunal Médico. Y es que para conceder una Gran Invalidez es obligatorio que el trabajador, además de las limitaciones laborales, requiera de la ayuda de terceras personas para desarrollar las actividades básicas del día a día.
En este sentido, los expertos de ‘Fidelitis’ exponen un caso real de un hombre al que se le denegó el reconocimiento de una incapacidad permanente por Gran Invalidez debido a las respuestas que ofreció su acompañante.
Los representantes del Tribunal Médico, en este caso, actuaron de un modo sorprendente. Así, se trata de un aspecto que deben tener en cuenta todos aquellos ciudadanos que vayan a solicitar una pensión de incapacidad permanente por Gran Invalidez.
Incongruencia entre las respuestas
Desde ‘Fidelitis’ señalan que «los representantes del Tribunal Médico hicieron salir al acompañante y realizaron una serie de preguntas a la persona que solicitaba la pensión». Después, hicieron salir al solicitante y pidieron la entrada del acompañante, al que les plantearon las mismas cuestiones.
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Cada una de estas personas ofreció respuestas diferentes a las mismas preguntas planteadas por los profesionales del Tribunal Médico. Un hecho que acabó siendo determinante para que el Instituto Nacional de la Seguridad Social no reconociera la Gran Invalidez a la persona solicitante.
Sobre este asunto, desde ‘Fidelitis’ indican que «como hubo ciertas discrepancias entre los que contestó el solicitante y el acompañante, el evaluador del Tribunal Médico reflejó dichas discrepancias y fue el motivo por el que se denegó esta solicitud de incapacidad permanente por Gran Invalidez».
En este sentido, hablamos de un caso real que pone de manifiesto la importancia de contar con un conocimiento previo antes de realizar una solicitud de incapacidad permanente en España.
Así, al solicitar una pensión de incapacidad permanente por Gran Invalidez, resulta clave que la persona solicitante y su acompañante respondan del mismo modo a las preguntas realizadas por parte de los profesionales del Tribunal Médico.
Para ello, es recomendable contar con un profesional especialista desde el inicio de la solicitud de incapacidad permanente por la vía administrativa. Un abogado experto puede asesorar al solicitante a la hora de solicitar una pensión de incapacidad permanente.
La Gran Invalidez es el grado de incapacidad permanente más elevado que se puede conceder a un trabajador en España. Por ello, es necesario cumplir con una serie de requisitos específicos.