Cumple 23 años ‘Un baño sin barreras’, programa que ayuda a disfrutar de la playa a personas con movilidad reducida en Huelva

La Cruz Roja lleva 23 años ofreciendo este servicio en Huelva para que las personas con movilidad reducida o discapacidad puedan ir a la playa

Servicio 'Un baño sin barreras' que ofrece la Cruz Roja en las playas de Huelva

Huelva siempre se define como un destino accesible e inclusivo. Muestra de ello, entre otras tantas, es que su servicio de playa asistida, conocido como ‘Un baño sin barreras’, ha cumplido 23 años. Este servicio que presta la Cruz Roja se encarga de superar límites para que las personas con movilidad reducida puedan disfrutar de la playa.

Este servicio de playa accesible cuenta con:

«Hacer posible que puedan sentir el agua del mar o dar un paseo por la orilla. Ver la inolvidable expresión de sus ojos cuando se dan un baño y compartir momentos de diversión y disfrute en la playa» destaca Juan José Blanco. Este es el presidente de Cruz Roja Huelva,  que ha destacado la «cualificación, el compromiso y la solidaridad» de los voluntarios.

Objetivo claro: que las personas con movilidad reducida puedan disfrutar de la playa

Este año, por segunda vez se lleva a cabo sobre la arena de la playa urbana de Punta Umbría (Huelva). Todo ello con el objetivo último de conseguir «salvar todos los obstáculos para que, en los meses de julio y agosto, más de 100 personas con movilidad reducida puedan disfrutar de la playa de forma plena», ha asegurado Blanco.

Para hacer posible el programa, los voluntarios de Cruz Roja prestan un servicio integral. Esto incluye la recogida de las personas usuarias y sus acompañantes en su domicilio, previa llamada a la ONG, y en la sede de las asociaciones adscritas, así como el transporte hasta la playa.

Una vez en la playa, les ayudan a bañarse, gracias a cuatro vehículos anfibios denominados anfibuggy. Al mismo tiempo que hacen posible que pasen una jornada «de convivencia y diversión en las carpas habilitadas para el disfrute de cada jornada».

Aunque el programa lleva funcionando todo el mes de julio, en la presentación oficial celebrada a finales de mes, la concejal de Políticas Sociales e Igualdad del Ayuntamiento de Huelva, María José Pulido, ha destacado que «el Consistorio de Huelva no duda en poner recursos a disposición de Cruz Roja, para eliminar cualquier barrera y que quienes lo tienen más difícil en su día a día puedan disfrutar del mar y de la diversión compartida en la playa. Esto es algo que muy probablemente no podrían hacer sin esta unión de fuerzas para que sea posible».

Por su parte, las concejalas de Servicios Sociales y de Turismo y Playa del Ayuntamiento de Punta Umbría, Valentina Esteban y Tamara Cazorla, respectivamente, han mostraron la «satisfacción» del Consistorio por «acoger por segundo año ‘Un baño sin barreras’.

Compromiso del Ayuntamiento Punta Umbría con una playa accesible

«Una iniciativa extraordinaria para la que ponemos a disposición de Cruz Roja toda nuestra infraestructura y una playa totalmente accesible con más 2.300 metros de pasarela de hormigón, tres zonas de sombra para personas con movilidad reducida y cuatro anfibuggy», así lo han subrayado. Añade además que «esta implicación corrobora el compromiso municipal con una playa accesible, inclusiva y apta para todos». Todo ello con el objetivo de que «cualquiera pueda darse un baño sin impedimentos».

Servicio 'Un baño sin barreras' que ofrece la Cruz Roja en las playas de Huelva
Servicio ‘Un baño sin barreras’ que ofrece la Cruz Roja en las playas de la provincia de Huelva

Finalmente, el presidente de Cruz Roja Huelva, ha explicado que «el equipo de voluntariado procede de distintas áreas asistenciales de la Organización», desde técnicos sanitarios a socorristas acuáticos, pasando por educadores sociales, hasta conductores de vehículos adaptados, de vehículos de apoyo y voluntariado de acompañamiento.

«Todos formados con anterioridad para garantizar la seguridad de todas las personas usuarias en los baños en el mar y para desarrollar las acciones de animación con paseos por la orilla del mar, charlas, talleres, juegos y otras actividades lúdicas. Estas ayudan a normalizar la vida de las personas con movilidad reducida eliminando barreras y llenado de alegría su verano», ha concluido.

Salir de la versión móvil