La Seguridad Social exige un mínimo de años de cotización para acceder a la pensión contributiva de jubilación en España. No obstante, algunos ciudadanos tienen la posibilidad de jubilarse antes de cumplir la edad de jubilación ordinaria que les corresponde.
En 2023, la edad ordinaria de jubilación es de 66 años y cuatro meses para las personas que han cotizado menos de 37 años y nueve meses a la Seguridad Social. Por su parte, las personas con 65 años pueden jubilarse a dicha edad en caso de haber cotizado igual o más de 37 años y nueve meses a la Seguridad Social.
Con todo ello, para tener derecho a una pensión contributiva de jubilación, la Seguridad Social exige que el ciudadano haya cotizado, al menos, durante 15 años a la Seguridad Social. Además, dos de esos años de cotización deben haberse producido en los 15 años anteriores a la jubilación.
Edad de jubilación a los 52 años
La edad más temprana a la que puede jubilarse una persona en España es a los 52 años de edad. Si bien, esta opción únicamente está permitida para los ciudadanos que cumplan unas condiciones muy específicas. Eso sí, también se deben cumplir unos requisitos de cotización.
Hablamos de la jubilación anticipada por discapacidad igual o superior a 65%. Así, las personas con discapacidad igual o superior al 65% pueden acceder a la jubilación desde los 52 años de edad, tal y como recoge la normativa de la Seguridad Social.
Para las personas con discapacidad igual o superior al 65%, la Seguridad Social exige el cumplimiento de 15 años de cotización; independientemente de que esos 15 años se hayan realizado con o sin la discapacidad reconocida.
Las cotizaciones a la Seguridad Social juegan un papel clave para acceder a la jubilación a cualquier edad y en cualquier modalidad, incluso para las personas con una discapacidad igual o superior al 65%.
Discapacidad igual o superior al 45%
En otro orden de cosas, es necesario aclarar que las personas con una discapacidad igual o superior al 33% pueden acceder a diferentes beneficios fiscales y sociales. Sin embargo, no es posible acogerse a una jubilación anticipada por discapacidad con una discapacidad reconocida del 33%.
Sin embargo, la Seguridad Social sí que contempla la jubilación anticipada por discapacidad igual o superior al 45%. En este caso, la edad de jubilación mínima es a los 56 años de edad, siendo considerablemente anterior a la edad de jubilación ordinaria.
Para la jubilación anticipada por discapacidad igual o superior al 45% la Seguridad Social también exige el cumplimiento de requisitos de cotización, aunque con matices diferentes a los que se requiere en caso de una discapacidad igual o superior al 45%.
En concreto, las personas con una discapacidad igual o superior al 45% también deberán contar con, al menos, 15 años de cotización a la Seguridad Social. No obstante, 5 de esos 15 años de cotización tendrán que haberse ejecutado con la discapacidad reconocida. Así lo recoge la nueva normativa de la Seguridad Social en relación a la jubilación anticipada por discapacidad para personas con un grado igual o superior al 45%.