La pandemia ha dejado una situación delicada en miles de familias españolas. Los salarios se han congelado, en muchos casos hasta han desaparecido y en el peor de todos los casos, esta falta de ingresos ha derivado a complicaciones a la hora de pagar el alquiler o la hipoteca de una vivienda. En España, el precio de las viviendas es un problema que mantiene ahogada económicamente a gran parte de la población.
Cobramos poco y pagamos mucho de alquiler, esto es una realidad en este país. Los precios de alquiler en la mayoría de ciudades en España está desorbitado. En capitales como Sevilla, el precio del alquiler raramente baja de los 500 euros por un piso de 2 habitaciones, por lo que para un trabajador que cobra 1.000 euros esto supone el 50% de sus ingresos. En Madrid las cosas son aún peores, al igual que en Barcelona, cuyos alquileres están en unos precios altísimos y que mantienen ahogada económicamente a las clases más humildes.
En las ocho capitales españolas los ciudadanos que pretenden vivir de alquiler tienen que destinar más de un tercio de sus ingresos al pago del alquiler, según un estudio llevado a cabo por el Idealista y que nos indica que no es en los grandes mercados donde se realiza un mayor esfuerzo económico.
¿En qué ciudad es más caro el alquiler?
En este sentido, según el estudio llevado a cabo por el portal inmobiliario, la ciudad de España donde más ingresos se destinan al alquiler es Santa Cruz de Tenerife (Islas Canarias) con un 39% del total de los ingresos. A Tenerife se le une Almería, con el 37% de los ingresos destinados al alquiler, y Las Palmas de Gran Canaria, Alicante, Segovia y Madrid, con el 36% en los cuatro casos. Además, Lleida y Sevilla también comparten posición con un 35%.
Además de estas ciudades, cuatro capitales se mantienen en la recomendación del 33%: Huelva, Guadalajara, Bilbao, Murcia y Barcelona. En Palma, Badajoz, San Sebastián y Toledo, mientras que en Pamplona, Castellón y Valencia se queda en el 31%, según los datos aportados por el Idealista, que compara los precios de alquiler en marzo de 2021 y la estimación de ingresos sobre esta misma fecha.
Por otra parte, los sitios más baratos para vivir en España son Palencia, Ourense y la ciudad autónoma de Melilla, cuyo esfuerzo para alquilar una vivienda es del 22%. Les sigue la ciudad de Huesca (23%), Pontevedra (24%), Soria (24%), Burgos (25%) y La Coruña (25%). En este sentido, con el 26% de los ingresos familiares se sitúan Valladolid, León, Zamora, Oviedo y Tarragona.
El salario de los jóvenes, un problema para los alquileres
Como podemos comprobar, el Coronavirus está siendo un auténtico quebradero de cabeza para esos jóvenes que empiezan a poner un pie en el mundo laboral. Con cada paso atrás por la pandemia se produce un nuevo retroceso en la situación laboral de los jóvenes, que protagonizan un dato en sus salarios que deja muy a las claras lo grave que está siendo la crisis del Covid-19 en España.
Según un estudio llevado a cabo por Samuel Bentolilla (Cemfi), Florentino Felgueroso (Fedea), Marcel Jansen (UAM y Fedea) y Juan F. Jimeno (Banco de España y Universidad de Alcalá), se ha llegado a la conclusión de que cada recesión produce un retroceso en la situación laboral de los jóvenes que podría derivar a una merma salarial de un 40%. Es decir, la pandemia podría reducir el salario de los jóvenes hasta en un 40%. Una auténtica burrada que hace entrever los efectos colaterales que tendrá la pandemia en un futuro no muy lejano.
En este sentido, el think-thank de temas económicos ha analizado el impacto de las crisis de los últimos 30 años en el mercado laboral de los jóvenes, apuntando que en España la crisis del Coronavirus es aún mayor debido a los problemas estructurales en el mercado de trabajo que perjudican seriamente a los jóvenes, dificultando su acceso a empleos más estables, por lo tanto, también tienen más dificultades a la hora de emanciparse y poder pagarse sin problemas el alquiler. Algo que tan solo unos privilegiados pueden optar, pues el precio de los alquileres en España es desorbitado y el salario de los jóvenes cada vez más precario.